El grupo Vodafone anuncia que las pruebas efectuadas con las técnicas de reducción de consumo energético de la RAN abierta arrojan una disminución del 9-12% respecto a la infraestructura tradicional. La operadora ha dado un nuevo paso hacia el uso de dicha arquitectura en el 30% de sus emplazamientos europeos en 2030.

Las pruebas se han llevado a cabo recientemente en un laboratorio del campus de la Universidad de Utah, en colaboración con Wind River, Intel, Keysight Technologies y Radisys. En ellas se han simulado los patrones de tráfico móvil del mundo real, lo que –según la propia Vodafone– es una novedad.

Nikoleta Patroni, ingeniera sénior de RAN abierta de Vodafone, afirma que se necesitarán más pruebas para garantizar que las ganancias de eficiencia energética en el laboratorio puedan reproducirse en varios emplazamientos con tráfico real de clientes.

“Prevemos superar la eficiencia energética de las redes móviles actuales. A dicho efecto, necesitamos un enfoque estandarizado de evaluación, prueba, medición y supervisión del consumo de energía en la RAN abierta desagregada de múltiples proveedores.”

Patroni explica que la RAN abierta ofrece a las operadoras una oportunidad de introducir una tecnología más respetuosa con el medio ambiente, pero señala que esto solo se conseguirá si todo el sector efectúa un esfuerzo conjunto.

Las operadoras se implican cada vez más en las llamadas iniciativas ecológicas, como por ejemplo la reducción de las emisiones de carbono.

Tanto las operadoras de móvil como las organizaciones del sector, incluida la GSMA, han potenciado durante los últimos años iniciativas ecológicas tales como la reducción de las emisiones de carbono.

En mayo, la GSMA anunció que 49 operadoras, que suponen el 62% de la facturación del sector del móvil, se han comprometido a reducir con rapidez sus emisiones a lo largo de la próxima década.