TrendForce cree que la producción de iPhones podría reducirse entre la actualidad y el primer trimestre de 2023, debido al impacto a largo plazo de los confinamientos impuestos por las autoridades en las instalaciones del fabricante por contrato Foxconn, ubicadas en Zhengzhou (República Popular de China).

La firma de análisis opina que la ralentización de la producción en Zhengzhou podría reducir el volumen de fabricación en dos o tres millones de unidades durante el trimestre actual. El objetivo original del cuarto trimestre era de 80 millones.

TrendForce señala que las citadas instalaciones de Foxconn son el principal centro de fabricación de los modelos iPhone Pro y Pro Max.

Así mismo, calcula que las ventas del primer trimestre de 2023, estimadas en 52 millones de unidades, podrían caer entre 4 y 6 millones, según el tiempo que tarde Foxconn en restablecer los niveles normales de producción.

Según TrendForce, las líneas de producción del iPhone han recobrado alrededor del 70% de la capacidad de Foxconn una vez controlados los brotes de Covid-19.

La firma observa que Apple está en el proceso de trasladar la producción de los modelos de iPhone Pro a Pegatron y Luxshare, e indica que esta última empresa podría ser la primera en recibir pedidos. En tal caso, la entrega del producto empezaría probablemente en el primer trimestre.

Kuo Ming-Chi, analista de Apple en TF International Securities, señala en un tuit que el confinamiento sin previo aviso de la planta de Foxconn en Zhengzhou –de modo que ahora los empleados residen y trabajan en ella sin poder salir al exterior– ha afectado a más del 10% de la capacidad de producción mundial destinada al iPhone.

Parece ser que Foxconn, ante la dificultad de contratar nuevos empleados mientras dure el confinamiento y las estrictas condiciones de trabajo que lo acompañan, ha elevado los salarios hasta en un tercio.