La Comisión Europea (CE) ha esbozado una hoja de ruta para alcanzar una serie de objetivos digitales de aquí al año 2030, centrándose sobre todo en el despliegue de la 5G y en la integración de tecnologías tales como la computación en nube y la IA empresarial.

En una declaración en la que explica su concepción y sus objetivos de transformación digital en Europa, la CE afirma que pretende garantizar la soberanía digital y aplicar políticas para “empoderar a las personas y empresas” mediante un programa denominado Digital Compass.

Dicho programa incluye el objetivo de garantizar que al menos el 80% de los adultos dispongan de competencias digitales básicas y que 20 millones de especialistas en TIC trabajen en la Unión Europea (UE) para 2030. La CE también pretende ofrecer una infraestructura segura y sostenible, que proporcione conectividad de gigabits a todos los hogares y cubra las zonas pobladas con 5G.

También aspira a fabricar semiconductores de vanguardia y sostenibles en la propia Europa, con el objetivo de alcanzar una cuota del 20% de la producción mundial y el despliegue de 10.000 nodos neutros desde un punto de vista climático. El organismo también quiere producir el primer ordenador cuántico de la región en un período de cinco años.
La CE quiere que el 75% de las empresas utilice servicios de computación en la nube, datos masivos e IA, y afirma que todos los servicios públicos clave deberían estar disponibles a través de internet.

Otros aspectos destacados del plan son el objetivo de poner en marcha proyectos multinacionales –como por ejemplo una posible infraestructura de procesamiento de datos interconectada paneuropea–, el despliegue de procesadores de bajo consumo de próxima generación, y administraciones públicas conectadas.
El plan solo se pondrá en marcha cuanto todos los países de la UE y el Parlamento Europeo le hayan dado su aprobación.