Según Nikkei Asian Review, los planes de Apple para incrementar la producción de iPhones durante el primer semestre podrían verse afectado por el brote de coronavirus en China.

Las fuentes de la mencionada publicación aseguran que Apple había ordenado a sus proveedores que fabricaran hasta 80 millones de iPhones en el primer semestre de 2020, lo que supone un incremento interanual del 10%. La mayoría de los pedidos se refieren al iPhone 11, un dispositivo básico que la firma podría presentar en marzo, cuya producción se estima en 15 millones de unidades.

Según el Nikkei Asian Review, la firma quería iniciar la producción del nuevo modelo durante la tercera semana de febrero, pero las restricciones a los desplazamientos impuestas por las autoridades chinas, así como la proximidad de los centros de fabricación a las regiones afectadas, podrían obstaculizarla.

Se ha informado de que más de 100 personas han muerto después de contraer el virus respiratorio, y se conocen más de 6.000 casos de infección en todo el mundo.

Foxconn, uno de los principales socios fabricantes de Apple en China, reconoce que el virus podría afectar a la cadena de suministro. Según el mismo medio de comunicación, Terry Gou, fundador de la firma, expresaba en fecha reciente su preocupación, al declarar en conferencia de prensa que su empresa dudaba de “permitir que los empleados regresen a China tras las vacaciones del Año Nuevo Lunar”.

Tal circunstancia agravaría los problemas de Apple, que informa de que los ingresos generados por el iPhone han disminuido en un 9% hasta situarse en 33.400 millones de dólares (unos 30.368 millones de euros) durante el cuarto trimestre fiscal de 2019.