Samsung Electronics ha publicado sus previsiones de ingresos para el primer trimestre, que reflejan un incremento interanual de los beneficios operativos que los analistas atribuyen a mejoras en el mercado de chips, favorecidas en parte por la demanda de IA.

En una breve declaración, que anticipa los resultados que se conocerán a finales de abril, Samsung estima sus beneficios operativos del primer trimestre en torno a los 6,6 billones de wones surcoreanos (unos 4.500 millones de euros), muy por encima de los 640.000 millones de wones surcoreanos (unos 440 millones de euros) del primer trimestre de 2023.

Los ingresos rondarían los 71 billones de wones surcoreanos (unos 48.500 millones de euros), frente a los 63,8 billones de wones surcoreanos (unos 43.600 millones de euros) del período equivalente anterior.

La firma ofrece pocos detalles, si bien los analistas citados por Financial Times, como por ejemplo Roko Kim, de Hana Financial Investment, entienden que la rápida mejora está asociada a la fuerte demanda de chips de memoria y a los precios más altos.

Richard Windsor, del blog Radio Free Mobile, opina que las cifras preliminares de Samsung confirman que “el auge en la demanda de IA no está beneficiando sólo a Nvidia, y es probable que una modesta recuperación en smartphones haya puesto la guinda”.

Windsor señala que Samsung se ha beneficiado de las tendencias positivas en el segmento de la electrónica de consumo, así como de la demanda de memoria con gran anchura de banda. Esta última se utiliza sobre todo en centros de datos y es además un “componente esencial de los sistemas de entrenamiento e inferencia de IA creados por Nvidia y otros”.