Huawei parece haber ganado una batalla en su guerra de patentes con Samsung. La firma china ha logrado la victoria en su ciudad nativa de Shenzhen.

Según Caixin, el Tribunal Intermedio de Shenzhen ha dictaminado que Samsung está obligada a dejar de vender y manufacturar dispositivos que infrinjan una determinada patente sobre tecnología para telefonía móvil 4G. Samsung también deberá pagar una pequeña tasa al tribunal, pero este no ha ordenado la compensación de otros daños y perjuicios.

No se ha revelado cuáles de los dispositivos de Samsung se verán afectado por la orden judicial.

Según la publicación citada, el tribunal de Shenzhen entiende que se ha cometido infracción contra una única patente y desestima las reclamaciones que implican a otras.

Huawei presentó sus quejas en mayo de 2016 mediante demandas en China y en los Estados Unidos. Por aquel entonces expresó su voluntad de ofrecer licencias sobre patentes en términos justos, razonables y no discriminatorios, pero también afirmó que tenía “derecho a una compensación razonable” por parte de las empresas que usaban su tecnología sin disponer de licencia.

Según parece, el tribunal afirma que Samsung “ha demorado con intención maliciosa las negociaciones” que se iniciaron en 2011 y que “su mala actuación es obvia”. La empresa surcoreana está estudiando la decisión con el objeto de “decidir las respuestas apropiadas”.

Samsung ya se enfrenta a competidores muy fuertes en China, como por ejemplo Huawei y otras empresas como Xiaomi, Vivo y Oppo, y también Apple.