Según Reuters, Turquía ha lanzado una aplicación de mensajería doméstica llamada PttMessenger que pretende ser más segura que WhatsApp, pero también es motivo de preocupación para algunos críticos que piensan que el gobierno de dicho país podría usarla para reforzar la vigilancia.

La aplicación ya se encuentra a disposición de las instituciones estatales y de ciertas empresas privadas, y parece que se ofrecerá al público en un plazo de seis meses.

Bekir Bozdag, viceprimer ministro del país, ha declarado en rueda de prensa que “los datos no se almacenan en el servidor central y por eso mismo es imposible acceder a ellos. Hemos desarrollado un sistema más seguro que WhatsApp.”

Con todo, los críticos piensan que las autoridades lo usarán para espiar a los disidentes, como parte de las medidas represivas del gobierno que se pusieron en marcha tras el fracaso del golpe militar de julio del 2016. Temen que PttMessenger se establezca como descarga obligatoria para los dispositivos electrónicos utilizados por tales instituciones, e incluso para los dispositivos personales de los empleados.

Según Reuters, Yaman Akdeniz, profesor de Derecho en la Universidad Bilgi de Estambul, afirma que “los usuarios deben pensarlo, no tres, sino cinco veces antes de usar una aplicación diseñada con el respaldo de un gobierno, sobre todo si se trata del gobierno de Turquía, donde se producen graves violaciones de derechos y libertades fundamentales”.

Más de 50.000 personas han sido encarceladas como consecuencia del golpe, y unas 150.000 han perdido o han visto suspendido su empleo.

Hace poco se ha presentado una propuesta de ley que afectaría a los organismos reguladores encargados de supervisar a los proveedores de contenido en Internet. La oposición considera que se trata de un acto de censura digital. Según la firma de análisis Statista, aproximadamente el 40% de la población turca era usuaria activa de WhatsApp en diciembre de 2016.