CCS Insight pronostica que las ventas mundiales de dispositivos ponibles casi se duplicarán entre 2018 y 2022, mientras el Apple Watch sigue teniendo éxito y promueve el interés por los relojes inteligentes en general.

La firma de analistas explica que las ventas de dispositivos ponibles alcanzarán los 117 millones de unidades en 2018 y pronostica que llegarán a los 233 millones en 2022, cuando el valor de mercado del segmento en cuestión se situará en 27.000 millones de dólares (unos 23.700 millones de euros).

CCS Insight afirma que dicho crecimiento se deberá sobre todo a la fuerte demanda de relojes inteligentes. Estos siguen ganando popularidad gracias al éxito de Apple, la firma líder en dicho mercado. La empresa estadounidense amplió su ĺínea de productos en septiembre con el Apple Watch Series 4.

La firma de análisis destaca que Apple ofrece sus relojes “en la gama de precios más amplia vista hasta ahora”, facilitando de este modo su adquisición por parte de los usuarios de iPhone.

Fuerzas impulsoras

CCS Insight considera que el éxito de Apple contribuye al crecimiento de todo el mercado, y que por ello también crece el número de usuarios de relojes inteligentes en general, lo que podría provocar una oleada de ventas de reemplazo durante los próximos años.

George Jijiashvili, analista sénior de ponibles, afirma que la demanda de dispositivos de reemplazo supone “un cambio importante respecto a la situación de hace unos años”, en la que había altos niveles de abandono por parte de usuarios tempranos.

Explica que “la combinación del éxito logrado por Apple con su Watch y de los elevados niveles de uso que vemos en los propietarios de relojes inteligentes refleja el valor que las personas atribuyen ahora a dichos productos”.

Apple podría ser la mejor posicionada para sacar partido de las ventas de reemplazo, gracias a una línea de relojes cada vez más diversificada. Pero el conocimiento y la satisfacción que los relojes inteligentes suscitan entre los “entusiastas de las tecnologías” también contribuirá a la expansión del mercado, pues facilitan el éxito de las nuevas firmas que entran en el sector.

Jijiashvili añade que “el Apple Watch está funcionando bien porque lo compran los propietarios de iPhones. Los usuarios de smartphones Android suponen un mercado mucho más grande y creemos que se dan las condiciones necesarias para una nueva ola de adopción de los relojes inteligentes, gracias a la salida al mercado de un abanico cada vez más atractivo de aparatos producidos por marcas de electrónica de consumo y moda.”