Amazon ha anunciado que trabaja con tres socios a fin de lanzar un producto para redes LTE privadas alojado en la nube. Puede que dicha operación se enmarque en una estrategia más amplia para posicionarse como competidor principal en el incipiente mercado de los 3,5 GHz.

El producto, desarrollado en colaboración con Athonet, Federated Wireless y Ruckus Networks para sacar partido de la banda de 3,5 GHz compartida en Estados Unidos, aspira a fomentar el despliegue rápido de aplicaciones de Internet de las Cosas industrial, como pueden ser la vigilancia en tiempo real, los contadores inteligentes y la vigilancia de seguridad.

La solución consta del controlador de espectro de Federated Wireless, que provee de acceso a la banda compartida; los puntos de acceso LTE en el interior de edificios, producidos por Ruckus Networks; un núcleo para red móvil privada de Athonet, y la plataforma de Internet de las Cosas en la nube de Amazon.

Parece que el grupo tiene muchas ambiciones, pues se dirige a desarrolladores, productores de software independientes, clientes del sector público e incluso operadoras de telecomunicaciones que buscan una manera más rápida y segura de hacer funcionar una red privada.

Iyad Tarazi, consejero delegado de Federated Wireless, indica en el blog de la firma que “la alianza supone un salto adelante en las redes de telefonía móvil privadas, porque combina la plataforma líder de Internet de las Cosas en la nube con nuevas soluciones de conectividad móvil que permitirán que todos los desarrolladores creen un próximo servicio transformacional”.

Competencia

En los Estados Unidos, el interés por la banda de 3,5 GHz se ha desarrollado antes que los despliegues comerciales que se esperaban para 2018, y operadoras importantes como AT&T, Verizon, Comcast, Charter Communications y Altice USA están realizando pruebas. Pero parece que los planes de Amazon en dicha banda son especialmente ambiciosos.

IEEE Spectrum informa de que Amazon podría estar detrás de una petición para realizar pruebas con 3,5 GHz remitida a la Federal Communications Commission (Comisión Federal de Comunicaciones) estadounidense por una firma llamada Chrome Enterprises. Dicha empresa solicita permiso para realizar pruebas con un número máximo de 150 transmisores fijos y 300 unidades móviles, distribuidos por tres ubicaciones distintas en California.

La petición es notable porque supone la realización de pruebas a gran escala. Por lo general, las operadoras llevan a cabo sus pruebas con docenas de dispositivos y transmisores, no con cientos. Otra operadora que busca la gran escala es Charter, que ha recibido autorización para efectuar pruebas con 100 transmisores fijos y 500 dispositivos receptores fijos y móviles en Centennial (Colorado).