El grupo Vodafone ha anunciado que planea recortar más de 1.000 millones de euros en costes desde el momento presente hasta el final de su ejercicio fiscal de 2026 (31 de marzo de 2026), mediante cambios estructurales y la adopción acelerada de procesos digitales, con el objetivo de mitigar los problemas macroeconómicos.

En la declaración financiera correspondiente al primer semestre de 2023 (que terminará a finales de setiembre), el consejero delegado Nick Read ha explicado que la firma tratará de racionalizar aún más sus operaciones y acelerar la digitalización con el objetivo de ahorrar.

El plan se suma a los esfuerzos de reducción de costes que ya está llevando a cabo el grupo.

Este nuevo intento de recortar los gastos generales se suma a las subidas de precios contractuales y a la reducción de descuentos en varios mercados. Read ha añadido que con ello se intenta “mitigar los efectos de un contexto económico caracterizado por los elevados costes de la energía y el aumento de la inflación”.

El directivo también ha señalado que, a pesar de las subidas de precios en sus mercados, Vodafone mantendrá las políticas con las que brinda apoyo a sus clientes más vulnerables.

Competencia
Por lo que respecta a los resultados del primer semestre, Vodafone ha registrado descensos interanuales de los ingresos por servicios en Alemania, España e Italia.

Estas dos últimas caídas, del 2,8% y del 4,5% respectivamente, se achacan a la intensa competencia.

En su mayor mercado, Alemania, que aporta el 30% de los ingresos del grupo, las cifras se han visto afectadas por las caídas en sus negocios de telefonía fija y televisión.

Los tres descensos se han visto compensados por incrementos en el Reino Unido y en el resto de Europa, así como por los beneficios de la filial africana Vodacom Group. Esta última ha registrado un aumento del 9,4% en los ingresos que la sitúa en los 3.200 millones de euros, gracias a unos tipos de cambio favorables.

Vodacom también ha registrado un incremento en el uso de datos y en los precios contractuales en Sudáfrica, así como un mayor volumen de transacciones en sus servicios de dinero móvil en otros mercados.

Los ingresos de Vodafone correspondientes al primer semestre del año fiscal ascienden a 22.900 millones de euros, con un incremento del 2%, al haber aumentado las ventas de equipamiento y los ingresos por servicios.

Los beneficios se han mantenido prácticamente estables en 1.200 millones de euros.