Bloomberg informa de que las firmas estadounidenses fabricantes de semiconductores han instado al gobierno de su país a acelerar la tramitación de los permisos especiales que les permitirían seguir vendiendo a Huawei, a pesar de las sanciones vigentes contra dicha empresa.

La Semiconductor Industry Association (Asociación de la Industria de Semiconductores) ha comunicado a Wilbur Ross, secretario de Comercio de Estados Unidos, que las firmas que la integran están preocupadas por la imposibilidad de comerciar con Huawei, el tercer mayor comprador de semiconductores procedentes de Estados Unidos. Entienden que dicha circunstancia perjudicará tanto a sus beneficios como a las inversiones en I+D.

Presiona para que se produzca una “rápida actuación” que autorice las ventas que no supongan ningún riesgo para la seguridad nacional, “sobre todo cuando existan productos equivalentes procedentes de otros países”.

En mayo, Estados Unidos incorporó a Huawei a una lista negra de empresas. Desde entonces, las firmas estadounidenses no pueden venderle productos, a menos que dispongan de una autorización especial a tal efecto. En agosto, el gobierno de Estados Unidos decretó un aplazamiento temporal que ha permitido que el comercio continúe bajo ciertas condiciones hasta el 19 de noviembre.
Según Reuters, más de 130 empresas estadounidenses habían presentado a finales de agosto solicitudes de permisos especiales, pero no se había otorgado ninguna.

En junio, Broadcom redujo su previsión de ingresos en 2.000 millones de dólares (unos 1.812 millones de euros) como consecuencia de la prohibición comercial, y Qualcomm advirtió posteriormente de un posible impacto en sus beneficios durante el segundo semestre natural.
En una reciente teleconferencia sobre beneficios, los directivos de Western Digital observaron que Huawei ha empezado a adquirir componentes a empresas competidoras. Aunque la firma haya reanudado las ventas de ciertos productos al fabricante chino, estas se encuentran en un nivel más bajo que el anterior.