EN DIRECTO DESDE MOBILE 360 SECURITY FOR 5G, LA HAYA: Mats Granryd, director general de la GSMA, ha afirmado que la “confianza” es un factor esencial para que la industria de la 5G alcance el éxito y ha declarado que todos cuantos participan en la industria de telefonía móvil tienen el deber de garantizar la seguridad y la fiabilidad de los futuros despliegues de redes.

En un año en el que firmas tan importantes como Facebook y WhatsApp han sufrido grandes brechas de seguridad y en algunos países se ha vetado el equipamiento de ciertas empresas chinas, Granryd ha aprovechado la intervención para advertir de los peligros que vamos a correr si se sigue por este camino.

Ha explicado que “si falla la confianza, sobre todo la confianza del consumidor, nos quedaremos sin nada. No tendremos producto, no tendremos servicio y, desde luego, no tendremos industria.”

“Ahora más que nunca, la confianza lo es todo en la industria de telefonía móvil. La confianza entre los consumidores y su operadora de telefonía… el proveedor de dispositivos y las aplicaciones que usan y… con quienes comparten datos valiosos y personales. La confianza entre operadoras, proveedoras de dispositivos y aplicaciones, y las empresas que los abastecen. Y la confianza entre todos ellos y los gobiernos y organismos reguladores.”

Granryd también se ha referido a la decisión de Estados Unidos de prohibir el equipamiento de Huawei por la presunta amenaza contra la seguridad nacional que este podría suponer, y ha señalado que un factor clave es “la confianza entre naciones”.

La seguridad en un mundo de conectividad inteligente

En referencia al conocido lema de “Conectividad Inteligente” de la GSMA, Granryd ha indicado que nuevas tecnologías como 5G, IA, datos masivos e Internet de las Cosas plantearán muchos desafíos de seguridad desconocidos hasta ahora.

Ha insistido en que “los sistemas de seguridad tienen que ser rigurosos y sólidos, y evolucionar sin descanso”, y a continuación ha advertido de que es importante hallar el equilibro entre riesgos y beneficios. Ha explicado que “debemos ir con cuidado para no sobrecargar a la industria con pruebas innecesarias” y ha apuntado a que “ningún sistema garantiza seguridad al 100%” y que “los mayores riesgos provienen de la interacción humana, o del error humano”.

Tres estrategias

El directivo de la GSMA ha aseverado que no existe una solución única que ponga fin a todos los riesgos de seguridad, pero ha esbozado tres estrategias que podrían alcanzar el éxito. En primer lugar, Granryd ha concedido un papel importante a la colaboración: “Es fundamental que trabajemos juntos y compartamos nuestras mejores prácticas para alcanzar objetivos de seguridad comunes, frente a un adversario que a menudo también es común. Colaboramos regularmente a través de grupos de trabajo como FASG [el Grupo de Fraude y Seguridad de la GSMA], cuya red cuenta con más de 1.600 miembros.”

En segundo lugar, ha destacado la importancia de la “cooperación” entre el comprador y sus proveedores, indispensable para la creación de asociaciones empresariales fiables. Ha afirmado que “en este contexto, cooperación significa trabajar juntos, compartir objetivos y lograr la máxima transparencia, sobre todo en lo que respecta a la seguridad. No debemos parecernos al hombre que no confía en nadie, porque ese es el mismo hombre en quien nadie confía.”

Y, en tercer lugar, Granryd entiende que “es fundamental que la seguridad se incorpore a la cultura de todos los que forman parte de nuestra cadena de suministros o participan de algún modo en el diseño del producto… desde el concepto inicial hasta el cierre de todo el proceso. El objetivo del NESAS [siglas inglesas de Plan de Garantías de Seguridad para el Equipamiento de Redes, Network Equipment Security Assurance Scheme], que dirigimos y supervisamos en cooperación con el 3GPP, consiste en llevar la seguridad a la cultura empresarial y al diseño de los productos. Ofrece garantías de seguridad en las fases de diseño y pruebas del producto. Incorpora las mejores prácticas.”