Los temores suscitados por la posición dominante de las grandes firmas tecnológicas y por sus efectos sobre la capacidad de las empresas más pequeñas para competir en el mercado han estado presentes durante varios años e incluso han animado a los organismos reguladores a emprender investigaciones de gran alcance.

Durante los últimos tiempos, Apple, una de las firmas con mayor valor en todo el mundo, ha sido objeto de numerosas críticas en dicho sentido.

Un sector importante de su negocio acapara los titulares y es uno de los que más se han visto sometidos a reproches y vigilancia. Las disputas suscitadas por las directrices de la App Store, sobre todo en lo que respecta al mantenimiento de un nivel de competitividad equilibrado entre los desarrolladores de aplicaciones, han estado en el punto de mira durante más de un año.

Tan solo durante los últimos cuatro meses, Apple se ha enfrentado a varios problemas, como por ejemplo una investigación de la Comisión Europea (CE) sobre las directrices de la App Store, una disputa legal con Epic Games provocada por la exclusión de su título Fortnite de la tienda de aplicaciones, y la alianza entre varios de sus principales críticos para lograr cambios en los mercados de aplicaciones.

Los aspectos más cuestionados de la App Store de Apple son su práctica de cobrar una comisión del 30% por las compras que se realizan desde las aplicaciones durante el primer año de uso, así como la queja de que la firma ha creado un entorno que beneficia a sus propias aplicaciones y frena la competencia.

Indiscutiblemente, la polémica ha llegado a un punto crítico en 2020, y el inminente lanzamiento de un iPhone 5G no hará más que recrudecerla.

La App Store y el iPhone 5G

Ian Fogg, vicepresidente de análisis de Opensignal, ha declarado a Mobile World Live (MWL) que, si bien Apple es una marca importante en varios países, en ninguno de ellos tiene tanto peso como en Estados Unidos, donde aproximadamente la mitad de los usuarios de móvil dispone de un iPhone, y que por ello “es probable que el iPhone 5G ponga en marcha e impulse el mercado de la 5G en Estados Unidos”.

Fogg señala que los juegos en la nube parecen ser uno de los casos de uso de la 5G más importantes para muchas personas, y que sería “un verdadero problema” si los proveedores de dichos servicios no pudieran ofrecerlos a los usuarios de iPhone.

Indica que “si los servicios de streaming de juegos no funcionan en el iPhone, solo la mitad de los usuarios podrá acceder a ellos en mercados como Estados Unidos o Japón”.

Añade que “cuando se observan los servicios de streaming de juegos, lo que se debate es si hay una tienda de aplicaciones dentro de la tienda de aplicaciones que es la App Store”.

En la actualidad, las directrices de Apple permiten que los servicios de streaming de juegos figuren en la App Store si cada uno de los títulos aparece como un elemento específico dentro del mercado de aplicaciones. Los desarrolladores de juegos han dirigido abundantes críticas a dicha política.

“Si uno se hallara en la posición de Microsoft, o de una de las operadoras, se vería obligado a trabajar de manera distinta para Apple que para las otras plataformas. Pero esa cuestión es importante porque los juegos en la nube son una de las cosas que funcionarán bien con la 5G.”

Cita una investigación reciente de Opensignal que concluye que los smartphones 5G a la venta Estados Unidos, incluidos los de Samsung, LG y OnePlus, alcanzan velocidades entre 1,6 y 1,9 veces más rápidas en promedio frente a las de la 4G.

“Si viéramos lo mismo en el iPhone, se trataría de un progreso gigantesco, que permitiría muchas aplicaciones nuevas, como los juegos en la nube.”

Se podría prescindir de la App Store

Con todo, las ofertas de juegos en la nube podrían ser viables sin necesidad de pasar por la App Store de Apple.

Robert Cavin, analista de la industria de medios digitales en Frost & Sullivan, ha explicado a MWL que los desarrolladores podrían prescindir las tiendas de aplicaciones mediante PWA (siglas inglesas de aplicación de web progresiva), como ha hecho Amazon con Luna, el servicio de juegos en la nube que anunció en fecha reciente.

El analista explica que “el uso de una PWA les permitió eludir las directrices y tarifas de las tiendas de aplicaciones, porque para usar Luna bastaba con un navegador. Las aplicaciones basadas en el navegador pueden instalarse en las pantallas de inicio de Android/iOS, incluso en los escritorios de Windows, Mac y Linux, y crean atajos que lanzan una página web en una ventana similar a la de una aplicación”.

Calvin señala que el despliegue de la 5G, que aporta una menor latencia, podría llegar a resultar beneficioso para el uso de las PWA como alternativa a las aplicaciones nativas, porque “reduce la ventaja en velocidad que las aplicaciones nativas solían ostentar antes de la llegada de la 5G”.

En cuanto a la reacción contra Apple, señala que es probable que dicha firma reconsidere sus tarifas si “la comisión que han de pagar los desarrolladores se convierte en un problema que lleva a un descenso en el desarrollo de aplicaciones y, en último término, a una reducción en las ventas de dispositivos y/o en los ingresos por servicios”.

La comisión de Apple baja del 30% al 15% al cabo de un año de suscripción. Cavin explica que “tal vez los desarrolladores esperaban que se hiciera un arreglo similar para las compras efectuadas desde aplicaciones de largo recorrido”.

Los críticos de Apple

Aunque Apple redujera a la mitad la comisión que cobra al desarrollador durante el primer año después de publicar la aplicación, quizá no le bastaría para apaciguar a los críticos.

Guillermo Escofet, analista principal de Omdia, arguye que “será mucho más probable que lo consiga si permite que los desarrolladores incorporen a la aplicación enlaces hacia sus propios mecanismos de facturación”, lo que acabaría por comportar que ambas opciones de facturación aparezcan una al lado de la otra.

Explica que semejante maniobra no comportaría un riesgo de grandes pérdidas para Apple, porque “es mucho más probable que los usuarios con datos de pago ya registrados en Apple opten por la opción más sencilla de pagar con un solo clic a través de la App Store, en vez de abrir un enlace externo”.

Si Apple optara por dicha política, algunos de sus críticos con mayor recorrido se mostrarían reacios a “aceptar dicha solución, a menos que Apple les permita mostrar también los diferentes precios junto con las opciones de facturación. Y no cabe duda de que Apple lo rechazaría.”

Aún no se sabe qué hará Apple para mantener una posición sólida en medio de los retos a los que se enfrenta, ni cuánto crecerá su cuota en el mercado del smartphone tras el lanzamiento de un iPhone 5G.

Por el momento, hay algo que está claro. La firma tendrá que responder a las inquietudes de reguladores y desarrolladores, a fin de no perder mercados clave al restringir el acceso a algunas de las experiencias de usuario más solicitadas.

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