Xiaomi ha registrado una caída de dos dígitos en los ingresos del último trimestre de 2022, debido al rebrote de la pandemia de Covid-19 en China y a las dificultades macroeconómicas que afectan al mundo entero, con descensos en las ventas de smartphones y en los precios medios de venta de estos.

En su declaración de resultados, Xiaomi se refiere a las fluctuaciones en el entorno macroeconómico y a las perturbaciones geopolíticas como factores que han influido en el cuarto trimestre de 2022.

La firma señala que el trabajo realizado para establecer su presencia en todo el mundo “durante los últimos años” la ha ayudado a “aislar con eficacia el negocio frente a los riesgos de estar en un solo mercado”.

Las ventas en el extranjero representaron el 49,2% de la facturación total en 2022.

Los beneficios netos del cuarto trimestre registraron un aumento interanual del 28,6%, hasta alcanzar los 3.100 millones de yuanes (unos 415 millones de euros), gracias a que otros ingresos casi se han triplicado, y también a una disminución del 54,1% en el impuesto sobre beneficios y a la reducción de los cargos por deterioro de las inversiones cotizadas.

La facturación disminuyó un 22,8% hasta situarse en 66.000 millones de yuanes (unos 8.800 millones de euros).

Las ventas de smartphones cayeron un 27,3% hasta 36.700 millones de yuanes (unos 4.900 millones de euros), con un descenso de ventas del 25,9%, hasta quedarse en 32,7 millones de unidades, y una reducción del 2% en el precio medio de venta, que se sitúa en 1.121 yuanes (unos 150 euros), debido a los esfuerzos por liquidar inventarios en el mercado exterior.

El negocio de Internet de las Cosas y estilos de vida ha disminuido en un 14,4% hasta quedar en 21.400 millones de yuanes (unos 2.800 millones de euros), con un descenso del 24,9% de los ingresos por televisores inteligentes y portátiles, hasta los 6.500 millones de yuanes (unos 869 millones de euros).

Los ingresos por servicios de Internet han descendido en un 1,4% hasta situarse en 7.200 millones de yuanes (unos 963 millones de euros).

El gasto anual en I+D aumentó un 21,7%, hasta los 16.000 millones de yuanes (unos 2.100 millones de euros).