El fabricante de smartphones Xiaomi es la víctima más reciente de las restricciones impuestas por el gobierno estadounidense a empresas de su sector. Así, ha sido incluida en una lista de firmas a las que se considera vinculadas al ejército de la República Popular China.

El Departamento de Defensa de Estados Unidos ha expresado en una declaración que le constan nueve “empresas militares comunistas chinas” adicionales que operan directa o indirectamente en el país. Una de ellas es Xiaomi.

En el tercer trimestre de 2020, Xiaomi superó a Apple y entró en la clasificación de los tres fabricantes de smartphones con mayores ventas en todo el mundo. La empresa china figura ahora en la lista estadounidense junto con Huawei, el fabricante de chips SMIC y las operadoras China Mobile, China Unicom y China Telecom.

El caso más conocido es el de Huawei, que también está en una lista del Departamento de Comercio que le restringe el acceso a los proveedores estadounidenses por motivos de seguridad nacional.

La lista del Departamento de Defensa responde a una orden ejecutiva firmada por Donald Trump en noviembre de 2020 y restringe la inversión nacional en empresas que, según dicho Departamento, son propiedad del ejército chino o están controladas por este.

En cumplimiento de la orden, la Bolsa de Nueva York ha excluido a las tres operadoras chinas durante el mes de enero.

La actuación contra Xiaomi se ha producido tan solo unas horas después de que Estados Unidos restringiera la adquisición de tecnología de red producida en varios países, entre ellos China, alegando temores sobre la seguridad de la cadena de suministro.

Impacto
A modo de respuesta, Xiaomi ha afirmado que siempre cumple con las leyes y regulaciones de los países donde realiza negocios, y que tan solo proporciona productos y servicios para uso civil y comercial.

“La empresa confirma que no es propiedad del ejército chino, que no está controlada por este ni vinculada a él de ningún modo, y que no es una empresa militar comunista.”

Añade que está estudiando las posibles repercusiones de la nueva situación. Xiaomi cotiza en Hong Kong y las restricciones podrían comportar que los inversores estadounidenses se vean obligados a retirar sus inversiones de la empresa.