Andrea Donà, el director de red de Vodafone UK, ha advertido que el sector necesitará apoyo financiero por parte del gobierno y de los organismos reguladores para explotar todo el potencial de la tecnología 5G autónoma, al tiempo que la propia operadora anunciaba que sería la primera firma del país que pondría en marcha una red de este tipo.

Donà ha explicado que el progreso en el despliegue de la 5G autónoma es lento, debido en parte a que las operadoras tienen que renovar el equipamiento de cada uno de los emplazamientos, lo que exige un importante compromiso financiero.

El directivo ha añadido que el necesario apoyo “podría adoptar la forma de préstamos a bajo interés, reforma de las regulaciones sobre la neutralidad de la red, fomento de la contratación pública de servicios 5G o reducción de las barreras al despliegue”.

Así mismo, Donà entiende que el lanzamiento de la 5G autónoma es un “paso adelante de gran importancia en el camino hacia la creación de una plataforma digital para la innovación en todos los sectores del Reino Unido”.

Vodafone ha destacado las ventajas en streaming de vídeo, juegos en red, mejora de la cobertura en interiores y mayor seguridad de la red.

La operadora ha explicado en detalle sus planes para realizar pruebas de su sistema de gestión de redes, que dirige automáticamente el tráfico a las redes 4G y 5G en función del servicio.

Las declaraciones de Donà coinciden con el inicio por parte de Vodafone de una prueba para sus clientes en siete grandes ciudades provistos de terminales Samsung y Oppo compatibles.

La mencionada prueba es un nuevo paso de Vodafone dentro de sus planes para la 5G autónoma. La operadora se alió a principios de 2022 con Ericsson para llevar a cabo una demostración de segmentación (slicing) de redes en laboratorio para un caso de uso de RV.