Nick Read (en la imagen, segundo desde la derecha) ha defendido la decisión de reducir la cuantía de los dividendos que se abonan a los accionistas, puesto que Vodafone ha sufrido pérdidas netas debido a circunstancias desfavorables y a la competencia en mercados clave en Europa y África.

En una sesión informativa, el consejero delegado ha culpado a un año fiscal “complicado en exceso” (que terminaría a finales de marzo de 2019) y ha destacado que España, Italia y Sudáfrica son mercados particularmente difíciles.

Si bien otras filiales de Vodafone han registrado un crecimiento saludable, es obvio que la firma “ha padecido una progresión de aumento de ingresos cada vez más débil a medida que avanzábamos en el año y los costes del espectro han resultado más altos de los previsto”. Por ello, el consejo de administración ha decidido “reajustar el dividendo a 0,09 € por acción”, frente a 0,15 € en el año anterior.

Se ha acordado dicha medida para “reconstruir el margen y respaldar la transformación por la que está pasando todo el grupo”. Vodafone ha anunciado sus planes para lanzar la 5G en el Reino Unido, sigue negociando la compra de los activos de Liberty Global en Alemania y Europa del Este, y se ha embarcado en una transformación digital que le costará 1.200 millones de euros.

Read confía en que el acuerdo de adquisición de Liberty Global habrá llegado a buen término a finales de julio y señala que dicha operación podría ejercer un impacto positivo sobre sus finanzas. Según parece, ha confirmado que la empresa tratará de obtener la revocación de un reciente veto a la fusión con TPG Telecom en Australia.

La operadora ha esbozado esta misma semana un acuerdo de venta de su filial en Nueva Zelanda. Según Read, dicho acuerdo valora la división en más de siete veces su EBITDA.

Aunque las cifras disminuyeron en el más reciente año fiscal, Read entiende que Vodafone comenzó a recuperarse durante el segundo semestre y ha pronosticado que ello “contribuirá a la recuperación gradual de los ingresos a partir del segundo trimestre” del año fiscal en curso.

5G

Read ha hablado poco después de que Vodafone detallara sus planes de lanzamiento de 5G en el Reino Unido. En una primera fase, quiere llegar a siete ciudades clave, que deberían haberse ampliado a doce a finales de diciembre.

La operadora afirma en una declaración que también será la primera en habilitar la itinerancia 5G entre Reino Unido, Alemania, España e Italia, y Read destaca que los smartphones compatibles de Xiaomi, Huawei y Samsung estarán disponibles a partir del 23 de mayo (al igual que un enrutador doméstico de Huawei).

Al tiempo que anunciaba el lanzamiento, Read ha hablado de las políticas gubernamentales referidas a la 5G y ha señalado que los términos aplicados a las ventas de espectro en Reino Unido y Alemania pueden resultar “onerosos” debido a las obligaciones de cobertura. Ha instado al Reino Unido a reconsiderar un plan por el que se exigiría a las operadoras que liciten espectro de 700 MHz junto con 3,7 GHz y ha explicado que una propuesta para la cobertura conjunta de zonas rurales puede ser un elemento clave en la negociación.

Ha explicado que la separación de las bandas de espectro “permite a las operadoras optimizar su red en función de sus necesidades”.

Cifras

La operadora ha registrado pérdidas netas de 7.600 millones de euros en el año que concluye a fines de marzo, frente a los 2.700 millones de euros de beneficios en el período fiscal 2018, sobre ingresos de 43.700 millones de euros, frente a 46.600 millones en el período equivalente anterior.

En términos reportados, los ingresos por servicios del grupo han disminuido en un 4,5%, hasta situarse en 36.500 millones de euros.

Read ha destacado que la tasa de abandono en todas sus filiales de telefonía móvil a lo largo de todo el año ha descendido hasta niveles récord y que su EBITDA ha aumentado en todos los mercados excepto España e Italia.

La filial española de Vodafone facturó por servicios 4.275 milones de euros durante el año fiscal, un 6,4% de descenso interanual. Los ingresos totales del ejercicio ascendieron a 4.688 millones, un 5,5% menos. La operadora cerró el ejercicio con 11.4 millones de telefonía móvil, 3,2 millones de banda ancha fija (de ellos, 2,9 millones con conexión de fibra óptica sobre 22,4 millones de hogares pasados, ya sea mediante despliegues propios, compartidos o acuerdos mayoristas) y 1,3 millones de clientes de TV de pago. Vodafone España destaca la reducción de la tasa de abandono (churn) de clientes de contrato, que disminuyó 3,5 puntos en móvil y 6,9 puntos en fijo.