Los organismos reguladores de la Unión Europea (UE) se enfrentan a peticiones cada vez más enérgicas para que se renueven las normativas continentales y se adopten políticas que permitan un despliegue rentable de la 5G, impulsen el desarrollo de la economía digital y reduzcan la desigualdad en el acceso a la tecnología.

En sendos comunicados independientes, Telefónica y la asociación sectorial GSMA se han sumado a las recientes declaraciones de ETNO y de Borje Ekholm, directivo de Ericsson, en las que se señalaban los problemas que obstaculizan el avance de Europa en materia de 5G y se destacaban los riesgos que una normativa obsoleta plantea a la economía digital.

La GSMA ha publicado un documento titulado “Sovereignty, Resilience and Trust” (“Soberanía, resistencia y confianza”), en el que se exponen varias medidas consideradas necesarias para ayudar a la industria de la telefonía móvil a respaldar los objetivos digitales y contribuir a la recuperación económica de Europa tras la pandemia de Covid-19 (nuevo coronavirus).

En dicho documento, la asociación señala que el continente necesita “un entorno de mercado que fomente la inversión en infraestructuras cruciales” y destaca que las políticas actuales han obstaculizado la inversión.

Así, recomienda políticas que no perjudiquen la inversión en infraestructuras, la mejora de los procesos de supervisión de las fusiones para que se tenga en cuenta un “panorama competitivo cambiante”, políticas justas en la asignación y fijación de precios del espectro, y fomento de acuerdos para la compartición de redes.

La GSMA también postula un enfoque coordinado en el plano internacional para fomentar un ecosistema de red abierta y aliviar las complicaciones logísticas en el acceso a emplazamientos de infraestructuras.

Con el propósito de facilitar la transición a la arquitectura 5G, la GSMA ha impulsado medidas que contribuirán a la creación y uso de infraestructuras móviles interoperables en la nube.

Frustración
Pocas horas antes de que se hicieran públicas las aspiraciones de la GSMA, José María Álvarez-Pallete, consejero delegado de Telefónica, expresaba inquietudes similares sobre los organismos reguladores de la UE en una sesión del Centre for Regulation in Europe (Centro para la Regulación en Europa).

Álvarez-Pallete ha afirmado que la región europea debería “revisar sus regulaciones tradicionales a fin de encarar la revolución de la 5G”.

“La regulación de las telecomunicaciones todavía es la gran frustración de las operadoras de redes europeas.”

“Si la regulación sigue centrándose en la presión generada por los precios, la industria no podrá abordar las inversiones para despliegues de fibra y 5G, ni para los nuevos servicios de datos, y los ciudadanos europeos se quedarán atrás en la transición digital.”