Telefónica ha adquirido los derechos de emisión en el mercado residencial de los partidos de LaLiga española de fútbol de primera división entre 2019 y 2022 a razón de 980 millones de euros por temporada, sumando un total de 2.940 millones. En virtud del contrato, la operadora asumirá el diseño y el desarrollo del contenido, que pasará a llamarse Liga Movistar a partir de la temporada 2019-2020.

De este modo, Telefónica arrebata el contrato de los derechos de fútbol a Mediapro, su titular actual. El grupo español de telecomunicaciones ha destacado que el importe acordado es un 5% inferior al del trienio en curso, y asegura que transferirá esta reducción de coste a los rivales que deseen contar con el contenido audiovisual, en virtud del derecho de compra mayorista que la CNMC le impuso para compensar la posición dominante adquirida con la compra de Digital+.

Aún así, está por ver si las otras plataformas de TV de pago seguirán contratando el servicio a Telefónica: Antonio Coimbra, consejero delegado de Vodafone España, ha manifestado repetidamente que los ingresos que el fútbol genera no compensan los costes, y de hecho la operadora de matriz británica ha incorporado recientemente otros canales premium de Movistar, en concreto los de series y de cine, al catálogo de su servicio de TV.

El contrato de derechos con Telefónica no es el único que LaLiga ha otorgado: Mediapro se ha adjudicado por 480 millones el paquete para emisión en bares y otros establecimientos públicos del territorio español. La suma se añade a los 4.485 millones que la misma Mediapro pagará por los derechos audiovisuales de las cinco próximas temporadas en el mercado internacional.

Además de los derechos de emisión de LaLiga entre 2019 y 2022, Telefónica también posee en exclusiva los de otros deportes como el baloncesto (Liga Endesa, Euroliga y NBA), motor (Formula 1 y MotoGP), y diversos torneos de tenis y golf, entre otros.