Un grupo de siete gobiernos europeos ha firmado un tratado que tiene como objetivo mejorar las credenciales medioambientales de dispositivos tales como smartphones y ordenadores portátiles, a fin de lograr un cambio mediante la unificación de sus requisitos de adquisición.

Por ahora, el International Circular and Fair ICT Pact (Pacto Internacional por unas TIC Justas y Circulares) ha sido ratificado por Países Bajos, Bélgica, Alemania, Noruega, Reino Unido, Austria y Suiza, y otros países, como Canadá, han entablado conversaciones para unirse al grupo.

Además de los gobiernos, la iniciativa está abierta a cualquier organización que adquiera dispositivos de TI y comunicaciones.

Los países que la respaldan se comprometen a contribuir a la creación de una red de compradores institucionales de dispositivos que sostengan valores coherentes en materia de sostenibilidad. El compromiso abarca diversos aspectos, como por ejemplo el uso de materias primas, el reciclaje y el respeto de los derechos laborales en el proceso de fabricación.

La organización que gestionará la alianza, y que lleva su mismo nombre, ha señalado que tiene como objetivo “crear una red de compradores que contribuya a generar una gran demanda colectiva de ordenadores portátiles y smartphones circulares y justos”.

Además, ha expresado su esperanza de que la “armonización de la demanda” de productos más sostenibles permita un “diálogo constructivo de alto nivel” entre los compradores institucionales y el mercado de las TIC.

Ha señalado que “cada uno por nuestra cuenta, no podemos influir en el mercado mundial. Tan solo si unimos nuestras fuerzas como compradores podremos poner sobre la mesa una demanda colectiva suficiente para hacer que la industria corrija su rumbo. Con el tiempo, también podríamos lograr que los consumidores accedan con mayor facilidad a teléfonos y portátiles sostenibles.”

Se trata de la más reciente entre diversas iniciativas que apuntan a mejorar las credenciales de sostenibilidad en el mercado de dispositivos y a reducir los residuos electrónicos.