Samsung, el gigante de los smartphones, está considerando cerrar las operaciones en una de las dos fábricas de teléfonos móviles que tiene en China, debido a sus pobres ventas de teléfonos inteligentes en aquel país y al aumento de los costos laborales en el mismo, según informa The Electronic Times (ET).

Las fuentes del citado periódico aseguran que el proveedor surcoreano tiene intención de interrumpir de modo inminente las operaciones de Tianjin Samsung Telecommunication, ubicada al sureste de Beijing, centrarse en mercados emergentes como la India. El cierre tendría lugar en 2019

La noticia indica que la empresa ya ha comunicado sus planes a los proveedores principales. Samsung también tiene otra fábrica de dispositivos en Huizhou, al sur de China.

El mercado de teléfonos inteligentes de China disminuyó en el segundo trimestre; las ventas cayeron un 5,9% respecto al año anterior, según los datos de IDC. Samsung ni siquiera figura entre las cinco marcas de teléfonos más vendidas en China continental.

Un portavoz de Samsung ha declarado a ET que “el volumen de producción de [la fábrica de] Tianjin ha ido disminuyendo constantemente y se espera que siga haciéndolo en el futuro”.

El mes pasado, Samsung comenzó a operar en una fábrica renovada en el norte de la India, como medida destinada a duplicar su producción de dispositivos y asegurarse una posición de liderazgo en el segundo mercado mundial de teléfonos inteligentes. La compañía también utilizará estas nuevas instalaciones para atender la demanda mundial de smartphones.