Samsung ha iniciado conversaciones con “varios fabricantes de smartphones” sobre la posibilidad de suministrarles procesadores Exynos para sus dispositivos, lo que intensificaría la rivalidad de la firma surcoreana con Qualcomm.

Bloomberg informa de que la firma china ZTE es una de las partes interesadas, lo que no es extraño, porque dicha empresa tiene que mitigar los problemas que sufre por no poder importar chips de los Estados Unidos. Sin embargo, Samsung aclara que el acuerdo con ZTE no está garantizado, y que su política consistirá en tratar con equidad a todos sus socios.

Inyup Kang, director de la división System LSI de Samsung, ha declarado a Reuters que se podría anunciar un acuerdo con otro fabricante de teléfonos a principios de 2019.

Hasta el momento, Samsung ha instalado los chips Exynos en sus propios dispositivos, al mismo tiempo que adquiría procesadores de otras firmas como Qualcomm y MediaTek. Hasta ahora, la única empresa que adquiría chips de Samsung para instalarlos en sus propios aparatos era Meizu.

Si bien Samsung se ha valido de sus chips Exynos para ejercer un mayor control sobre la cadena de aprovisionamiento –por ejemplo, mediante una gestión integral de la tecnología utilizada–, también realiza lucrativos negocios con la venta de componentes a otras firmas, incluidas sus propias competidoras.