EN DIRECTO DESDE EL FORO ECONÓMICO MUNDIAL, DAVOS: Ren Zhengfei (en la foto), fundador y consejero delegado de Huawei, ha anunciado que Estados Unidos podría endurecer una vez más las sanciones comerciales contra su firma, pero insiste en que ésta no sufrirá un impacto significativo, porque se halla en uno de sus mejores momentos.

Ren ha declarado en una sesión del foro que su empresa no se ha visto muy perjudicada por su inclusión en una lista negra comercial de Estados Unidos en 2019. “Como hace diez años ya no nos sentíamos seguros respecto a Estados Unidos, gastamos cientos de miles de millones de dólares en la elaboración de un plan de contingencia, y por eso hemos aguantado la primera ronda de ataques. Ahora tenemos más confianza en que podremos sobrevivir a nuevos asaltos.”

Afirma que Estados Unidos no debería inquietarse por la posición de Huawei y de China en el mundo.

Observa que el sistema educativo chino aún preserva esquemas propios de la era industrial y hace hincapié sobre todo en la formación de ingenieros.

“La IA no puede crecer con rapidez en China, porque esta requiere un gran número de matemáticos, supercomputadoras, superconectividad y superalmacenamiento. China aún es principiante en esas áreas de tecnología a gran escala. Los Estados Unidos se preocupan demasiado. Se han acostumbrado a ser el número uno en todo, pero no pueden ser necesariamente los mejores en todo lo que hacen.”

Ren apunta a que habría que llevar a cabo un estudio serio sobre los usos de la IA que pueden beneficiar a la sociedad, y acordar normas sobre lo que se puede y lo que no se puede estudiar.

Entiende que tanto el gobierno de Estados Unidos como el de China deberían invertir más en formación básica e investigación, si de verdad quieren asistir a un rápido crecimiento de la IA.

La amenaza de la IA

En cuanto a las inquietudes suscitadas por las fuertes inversiones de su firma en IA, Ren declara que Huawei investiga en la llamada IA “débil” e impone límites estrictos a su campo de aplicación. Se centra en sectores tales como conducción autónoma, minería de datos y biotecnología.

“Los progresos de la IA pueden crear una enorme riqueza. Se dice que muchas personas se quedarán sin empleo a medida que se cree esa riqueza. Pero la lucha contra la creciente brecha en ingresos es una cuestión social, no tecnológica.”

Yuval Noah Harari, profesor del departamento de Historia de la Universidad Hebrea de Jerusalén, señala que las frecuentes comparaciones de la IA con la bomba nuclear son válidas, en tanto que el peligro que suponía el armamento atómico unió a la humanidad frente a una amenaza común incluso en plena Guerra Fría, lo que ayudó a desarrollar normas para evitar lo peor.

Pero explica que el problema que supone la IA, en comparación con las armas nucleares, es que sus peligros no son tan evidentes. “Son muchos los que creen que una carrera armamentística en IA se podrá ganar, y eso es muy peligroso, porque aparece la tentación de tratar de ganar la carrera y dominar el mundo”.

A pesar del prolongado conflicto con Estados Unidos, Ren no cree que el mundo vaya a dividirse en dos sistemas tecnológicos distintos, porque “la ciencia gira en torno a la verdad”.

“El científico que hace descubrimientos quiere darlos a conocer al mundo. En un nivel más profundo, el mundo está unido y todo está relacionado.”