Tras una larga espera, la nueva operadora japonesa Rakuten Mobile ha presentado sus tarifas con miras al lanzamiento de su servicio 4G, previsto para el 8 de abril. La ambiciosa estrategia que ha esbozado en una conferencia de prensa virtual plantea tantas cuestiones como las que resuelve.

La división de telefonía móvil del gigante del comercio electrónico ha destinado 600.000 millones de yenes (más de 5.000 millones de euros) a la construcción de una red móvil “totalmente virtualizada”, con el objetivo de conseguir 15 millones de abonados para 2028.

Por el lado positivo, la nueva operadora introduce una tarifa de datos única e ilimitada, con servicio gratuito durante 12 meses para los tres primeros millones de clientes. Mickey Mikitani, consejero delegado de la firma, señala que no hay planes para ofrecer tarifas de datos adicionales en el futuro. Una vez finalizado el primer año, y presumiblemente para todos los abonados aparte de los primeros 3 millones, un paquete mensual costará 2.980 yenes (unos 25 euros), aproximadamente la mitad de lo que cuestan los paquetes con elevado volumen de datos ofrecidos por NTT Docomo, KDDI y SoftBank.

La introducción de una estructura de tarifas sencilla es una medida acertada para una industria en la que se han hecho célebres las tarifas enrevesadas y difíciles de entender de las operadoras tradicionales.

Lo que no parece tan sencillo es que Rakuten Mobile ofrezca datos en dos niveles distintos. Los abonados dispondrán de datos ilimitados cuando usen la red de la propia firma y tan solo 2 gigabytes al mes cuando se encuentren en itinerancia en la red de su socia KDDI. ¿Cómo sabrá el usuario que se acerca al límite mensual de datos, y qué procedimiento seguirán los sistemas de facturación de la firma para efectuar un seguimiento del uso de las redes, que sin duda comportará cambios frecuentes?

Cobertura limitada

La mayor debilidad de la operadora es que sólo contará con red propia en zonas específicas de tres ciudades: Tokio, Nagoya y Osaka. La nueva firma prevé contar con 4.400 estaciones base desplegadas en el momento del lanzamiento del servicio. Según sus planes, se habrán casi duplicado en marzo de 2021, pero a pesar de todo seguirán siendo una fracción del número de sitios que las tres principales operadoras poseen en todo el país. Fuera de dichas áreas se recurrirá a la red de KDDI.

En una publicación reciente, Fitch Ratings afirmaba que la lentitud en la mejora de la cobertura podría frenar la adopción del servicio.

Marc Einstein, analista de la firma japonesa de investigación ITR, piensa que la firma más beneficiada por la presencia de una cuarta operadora en el país (que el gobierno nipón llevaba años buscando) será KDDI. Se cree que esta empresa está ganando una fortuna gracias al acuerdo de itinerancia.

El analista ha declarado a Mobile World Live que el eventual éxito de Rakuten Mobile dependerá de la calidad del servicio que ofrezca, porque todo el mundo usará aplicaciones de voz para hacer llamadas y la operadora permanecerá largo tiempo en la 4G. Su servicio comercial 5G está previsto para 2021.

En cambio, las grandes operadoras planean el lanzamiento de 5G para marzo de 2020.

“Si la cobertura 4G [de Rakuten Mobile] es mala y corre la voz, se verán en apuros. Pienso que triunfarán, o fracasarán por la calidad de su servicio.”

Einstein señala que las firmas rivales de Rakuten, según fuentes internas, no sienten una especial preocupación por la irrupción de este nuevo competidor, porque dudan de que la tecnología pueda adelantarse a su tiempo.

Una amenaza menor

Atul Goyal, analista financiero de Jefferies, está de acuerdo con lo dicho hasta ahora y afirma en una nota de investigación que no espera un cambio sustancial en el número de abonados de NTT Docomo, operadora líder en el mercado. Señala que nuevos factores como la falta de presión adicional sobre los precios por parte del gobierno -que en su lugar se plantea una reducción de impuestos para acelerar el despliegue de la 5G- favorece a las otras firmas y podría perjudicar a Rakuten Mobile.

De todos modos, reconoce que si la nueva firma consigue calidades decentes y una oferta barata podría llegar a perjudicar la posición de las operadoras ya consolidadas.

Desde una perspectiva empresarial, Einstein entiende que si Rakuten Mobile conserva la tarifa única y el promedio de ingresos por usuario (ARPU) se mantiene en torno a 3.000 yenes (unos 25 euros) mensuales, la facturación total podría alcanzar los 540.000 millones de yenes (más de 4.500 millones de euros) en 2028. “Dado que están gastando 600.000 millones de yenes (más de 5.000 millones de euros) para construir la red, el período de amortización será muy largo.”

Como es natural, la firma busca otras fuentes de ingresos. Mikitani ha destacado en la conferencia de prensa que la división de telefonía móvil no es un negocio independiente, sino que la empresa matriz apuesta por generar ingresos adicionales a partir de su lista cada vez más abultada de servicios, como por ejemplo banca a distancia, pagos con el móvil y aplicaciones de mensajería.

Pero la eficacia del uso de una red móvil totalmente virtualizada en la nube y que depende de nuevas tecnologías aún está por demostrar, al igual que los ambiciosos planes de la firma para automatizar la red. Sin duda, pronto sabremos si dicha tecnología y su correspondiente modelo de negocio ya están a punto.

Las opiniones editoriales expresadas en este artículo son exclusivas del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de la GSMA, sus Miembros o Miembros Asociados.