En 2018, por segundo año consecutivo, el fuerte crecimiento de Huawei se atribuye en buena parte a la división de Consumo. Su éxito en dicho terrero desvía la atención que se habría podido prestar al primer descenso anual en su división de Operadoras, que en otros tiempos ocupó una posición predominante.

Cabe preguntarse cuán significativa es la caída del 1,3% en los ingresos de la división de Operadoras, que ha quedado por detrás del grupo de Consumo como principal fuente de ingresos de la firma. No olvidemos que en 2017 los ingresos de la división de Infraestructuras aumentaron tan solo un 2,5% interanual hasta situarse en 297.800 millones de yuanes (unos 39.358 millones de euros).

El equipamiento de Huawei para redes ha sido prohibido en varios mercados, las operadoras de Australia y Japón han optado por no utilizarlo, y los Estados Unidos mantienen la presión sobre sus alliados para que también lo prohíban. Cabría imaginar que dicha situación empieza a cobrarse su tributo.

Pero los datos sobre el mercado general de infraestructuras de telecomunicaciones pueden interpretarse también de otro modo. Según las cifras presentadas por IHS Markit, el mercado mundial de redes móviles (que abarca hardware y software para 2G, 3G y 4G) se contrajo en un 4% interanual en 2018, hasta quedarse en un valor total de 51.600 millones de dólares.

El segmento de RAN funcionó mejor de lo que se esperaba, pero los ingresos se mantuvieron relativamente estables de un año para otro. Huawei terminó 2018 con una cuota del 31% en el mercado mundial de infraestructuras para telefonía móvil, que incluye las redes de macroceldas para 2G, 3G y 4G.

Demanda insuficiente

El estudio específico de los gastos de las operadoras en el mercado doméstico de Huawei aporta datos significativos. China suele representar más de un tercio del gasto mundial en equipamiento para redes de telefonía móvil.

A lo largo de 2018, China Telecom redujo su gasto de capital (capex) en un 15,5% interanual, mientras que la operadora líder del mercado, China Mobile, recortó sugasto en redes en casi un 6%. China Unicom es la única firma de telefonía móvil incrementó ligeramente el gasto de capital hasta los 44.900 millones de yuanes, porque ha invertido para ponerse a la altura de la cobertura 4G de sus rivales y promover la aceptación de la LTE.

A principios del mismo año 2018, la cobertura en redes 4G de China ya alcanzaba a más del 90% de la población, por lo que el descenso en el gasto no es sorprendente.

Visión de futuro

Las tres operadoras móviles de China finalizaron 2018 con un total de 4,79 millones de estaciones  base para 4G, según las cifras de sus respectivas memorias anuales de 2018. Es obvio que las ventajas de invertir en redes 4G en dicho país son limitadas, aunque el gasto en VoLTE sí vaya a incrementarse considerablemente. Por otra parte, es probable que las redes 5G no se comercialicen hasta 2020.

Se ha previsto que la empresa líder en el mercado reducirá en 17.000 millones de yuanes (unos 2.246 millones de euros) su inversión de capital durante 2019, con lo que ésta se quedaría en 150.000 millones de yuanes (unos 19.825 millones de euros), si bien dicha cantidad no incluye una suma no revelada para financiar las pruebas de 5G. La firma planea aumentar el porcentaje de inversión en capital dedicada a la infraestructura móvil desde el 41% de 2018 a un 45,5% en 2019. Es una buena noticia para los proveedores de RAN.

China Telecom tiene previsto invertir 9.000 millones de yuanes (unos 1.190 millones de euros) en 5G durante el 2019 y cuenta con gastar otros 3.100 millones de yuanes (unos 410 millones de euros) en concepto de inversión en capital, con lo que esta se elevaría a 78.000 millones de yuanes (unos 10.308 millones de euros). Entretanto, China Unicom estudia ampliar su inversión en capital en 13.700 millones de yuanes (unos 1.810 millones de euros), con lo que se situaría en 58.500 millones (unos 7.730 millones de euros). Según se dice, dicha cantidad incluiría el coste de las pruebas con 5G.

Está claro que, en China, los proveedores de equipamiento para redes tienen buenas perspectivas para 2019.

Antes de tiempo

Marc Einstein, analista principal de ITR, ha declarado a Mobile World Live que cree que Huawei ha capeado la tormenta mejor que el resto de grandes empresas, porque la cobertura de LTE llega a casi todas partes, y el gasto en 5G todavía recae sobre los proveedores de prueba y medición, y sobre los suministradores de construcción de redes.

Según el experto, “es demasiado pronto para determinar si los vetos están teniendo algún impacto, porque tan solo he visto unos pocos casos de pequeñas operadoras regionales estadounidenses que han reemplazado equipamiento. Pero creo que lo veremos, en cierta medida, en el próximo año […] tras las decisiones adoptadas por SoftBank y por las operadoras de Australia y Nueva Zelanda.”

Como ya falta poco para conocer los informes financieros del primer trimestre, pronto apreciaremos los primeros indicadores sobre el estado de los gastos en la red mundial, y más específicamente si la disminución de los ingresos provenientes de operadoras padecida por Huawei se ha debido al estancamiento de la demanda en todo el mundo, o si es el primer síntoma de que las prohibiciones gubernamentales han tenido efecto sobre el uso de su equipamiento para 5G.

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