Dos senadores estadounidenses han apelado a Canadá para que evite el equipamiento de redes 5G proporcionado por Huawei, después de que el máximo responsable de ciberseguridad de este último país afirmara que no es necesario vetar a dicho fabricante.

En una carta remitida a Justin Trudeau, primer ministro de Canadá, los senadores Marco Rubio y Mark Warner han expresado su “grave preocupación” por entender que las medidas de seguridad que protegen las redes canadienses son “inadecuadas”. Explican que dichas medidas podrían poner en peligro la seguridad nacional de Canadá y la colaboración entre dicho país y los otros miembros de la coalición de inteligencia compartida Five Eyes (Cinco Ojos).

Dos miembros de dicho grupo –Estados Unidos y Australia– ya han emprendido acciones para expulsar a Huawei de sus mercados.

Rubio y Warner observan que las operadoras estadounidenses y canadienses se benefician en común de las “economías de escala en equipamiento diseñado para frecuencias armonizadas a escala regional”. Por ello, advierten que el uso de equipos Huawei para la 5G podría “amenazar gravemente a dicha dinámica, con lo que las operadoras canadienses y estadounidenses podrían verse privadas de la escala necesaria para desarrollar con rapidez redes 5G”.

Tanto Rubio como Warner forman parte del Comité de Inteligencia del Senado, que supervisa programas y actividades de inteligencia para la administración pública.

La carta reitera las acusaciones de las autoridades estadounidenses de que Huawei está vincuada al gobierno chino y, por ello, constituye una amenaza contra la seguridad nacional.

Huawei niega rotundamente dichas afirmaciones, y hace poco argumentó ante la FCC (siglas inglesas de Comisión Federal para las Comunicaciones, el organismo regulador estadounidense) que su ausencia del mercado dañará a la competencia, hará subir los precios y entorpecerá la implantación de la 5G.