Stéphane Richard (en la foto), consejero delegado de Orange, parece haber abierto la puerta al establecimiento de alianzas con otras operadoras a fin de crear un sistema paneuropeo de torres de telefonía móvil, y ha instado a sus competidores a utilizar con mayor inteligencia sus activos en infraestructuras.
En una conversación con el Financial Times (FT), Richard ha declarado estar abierto a diversas posibilidades por lo que respecta al negocio de torres de telecomunicaciones de Orange, que comprende 59.000 torres y está valorado en unos 10.000 millones de euros.

A finales de 2019, Orange esbozó planes para escindir en divisiones nacionales los activos de torres de la mayoría de sus filiales europeas, como paso previo a la creación de una empresa para alojarlos.

Sin embargo, Richard reconoce que ha tardado en actuar. Cree que la escisión del negocio de torres ayudaría a la operadora a decidir su estrategia de cara al futuro, y afirma que combinar sus torres en Europa, África y Próximo Oriente con las de Deutsche Telekom o las del grupo Vodafone supondría una “interesante oportunidad”.
La firma prevé comunicar más detalles sobre su estrategia de torres cuando publique los resultados anuales en febrero de 2021.

Cellnex arrasa

Las torres de telefonía móvil se han convertido en un tema candente en la industria, porque muchas operadoras han procedido a vender sus activos a firmas especializadas, encabezadas por Cellnex, con sede en España, así como a fondos de capital privado, para luego tomarlos en arriendo.

Las operadoras consideran que dicha estrategia les permitirá recaudar fondos para financiar las inversiones en redes 5G y reducir sus considerables deudas.
Hace escasos días, Cellnex cerró un acuerdo para adquirir los activos de CK Hutchison en torres europeas, distribuidos en seis países, por un precio de 10.000 millones de euros. Anteriormente había llegado a acuerdos semejantes con Arqiva en el Reino Unido, NOS en Portugal, Sunrise en Suiza e Iliad en Francia.

Cellnex cuenta con gestionar un total de 103.000 torres y emplazamientos de telecomunicaciones, en el caso de que todas las transacciones propuestas lleguen a buen término.
Richard reconoce que tal vez la valoración de las torres efectuada por Cellnex es superior a la que realizan las operadoras, lo que de algún modo ejerce presión sobre estas últimas.

Pero añade que “se puede seguir un camino más inteligente que limitarte a vender tus torres a Cellnex”.

Desgravación fiscal

Por otra parte, Orange ha explicado que prevé recuperar 2.200 millones de euros en impuestos, provenientes de un pago que efectuó en 2013.
El Tribunal Supremo francés ha fallado a su favor, al cabo de una larga disputa ocasionada por una factura impositiva que recibió en 2005 tras la integración de la filial Cogecom.
Orange afirma que usará dicha suma para reducir su deuda neta.