La firma japonesa NTT ha formalizado un acuerdo a varios años vista con SES. En virtud del mismo, ofrecerá productos de Edge y 5G privada por satélite a sus clientes empresariales, a fin de hacer frente a un incremento de la demanda que, según ambas empresas, desborda a las redes terrestres fijas.

En un comunicado de prensa conjunto, NTT anuncia que ofrecerá su producto Edge-as-a-Service a clientes empresariales mediante o3b mPower, el sistema de comunicaciones por satélite de órbita terrestre media, de segunda generación, suministrado por SES.

NTT declara que el acuerdo servirá para ofrecer “conectividad ampliada y fiable”, y añade que el sistema está destinado principalmente a empresas que operan en regiones “donde faltan redes terrestres”.

La firma posiciona Edge-as-a-Service como medio para que las empresas puedan incrementar su eficacia e ingresos a través de Edge e Internet de las Cosas, además de aprovechar el potencial de las redes privadas para impulsar industrias tales como la energía, la minería y la fabricación, “que de otro modo se verían limitadas en conectividad”, a fin de promover la transformación digital.

El sistema satelital de ambas firmas ofrecerá cobertura a más de 190 países con itinerancia público-privada, además de poner a disposición servicios adicionales de desarrollo de aplicaciones, integración de sistemas y servicios gestionados.

Para superar la brecha en espectro 5G
Olivier Posty, director general de NTT en Luxemburgo, destaca las ventajas de la 5G privada y afirma que, a medida que los clientes sigan innovando, “los socios de red provistos de las capacidades y la experiencia adecuadas serán fundamentales para alcanzar el éxito en el competitivo mercado actual”.

Alejandro Cadenas, vicepresidente adjunto de investigación sobre Movilidad de Telecomunicaciones para Europa, Próximo Oriente y África en IDC, afirma que la alianza entre ambas firmas constituye un “hito pionero en el sector” y brindará nuevas oportunidades en países “donde el espectro 5G aún no está a punto”.

En fecha reciente, SES anunció que había entablado conversaciones con Inmarsat, empresa rival en el sector de satélites, sobre una posible fusión que podría dar lugar a una firma valorada en más de 10.000 millones de dólares (unos 9.100 millones de euros).