Nokia ha anunciado que un grupo industrial encabezado por sus Bell Labs ha creado un proyecto llamado WIVE (por WIreless for VErticals, “[servicios] inalámbricos para [industrias] verticales”), “a fin de que nuevos tipos de industrias puedan sacar partido de las tecnologías móviles más recientes, sobre todo de la 5G, para competir”.

El proyecto está cofinanciado por la Agencia Finesa para la Financiación de la Innovación, con socios como Telia y la autoridad que regula las comunicaciones en Finlandia.

El proyecto WIVE tendrá una duración de 2 años y trabajará sobre todo en las necesidades del sector de medios de comunicación y entretenimiento, así como en la conectividad entre máquinas para áreas de aplicación tales como URLLC (siglas inglesas de “comunicaciones de baja latencia ultrafiables), y atenderá a sectores tales como redes eléctricas inteligentes y máquinas por control remoto.

También se estudiará la mMTC (siglas inglesas de “conectividad masiva tipo máquina”), que permitirá la conexión de un gran número de dispositivos con costes y consumo energético limitados.

Nokia afirma en un comunicado que “WIVE aspira a desarrollar conceptos y habilitar tecnologías, así como a realizar pruebas y experimentar con nuevos servicios verticales ofrecidos por la 5G, sobre todo URLLC, mMTC y distribución de contenidos de los medios de comunicación. Los nuevos servicios de comunicación tienen requisitos muy variados de fiabilidad, latencia, tasas de datos, seguridad y disponibilidad. El proyecto WIVE quiere demostrar que las futuras redes 5G podrán satisfacer dichos requisitos, y que aportarán una mayor flexibilidad y eficiencia de costes.”

WIVE también investigará y promoverá políticas de espectro flexibles, así como planes de gestión del espectro que permitan liberar nuevos activos de espectro para la 5G.

Mike Murphy, director de tecnología de Nokia para América del Norte, explicaba recientemente en MWC Americas que la adopción de la 5G no se producirá tan solo mediante cambios incrementales, sino que exigirá una reestructuración significativa de las redes de las operadoras. Afirma que lo más urgente es realizar ajustes para mejorar la distribución y mantener baja la latencia.