NEC ha desarrollado un mecanismo para el control dinámico de los recursos de hardware de un procesador Intel Xeon, que incorpora capacidades avanzadas de gestión de energía a las redes 4G y 5G con el objetivo de reducir el consumo energético y los costes.

La empresa ha anunciado, basándose en una prueba de rendimiento UPF (siglas inglesas de función de plano de usuario), que dicho mecanismo reduce el consumo energético en más de un 30% en un entorno casi comercial, mediante una red central convergente 5G autónoma.

Así mismo, NEC se ha servido de la telemetría del procesador escalable Xeon de Intel para la lógica de determinación de carga de UPF, ha elaborado una versión específica de dicha lógica para adaptarla al tráfico comercial real y la ha implantado en un kit de desarrollo de plano de datos integrado en su UPF.

La empresa ha señalado que, a menudo, las aplicaciones de UPF que gestionan el tráfico parecen consumir el 100% de los recursos de la CPU.

NEC afirma que ha optimizado el consumo energético mediante el ajuste dinámico del uso del procesador Xeon al tráfico en tiempo real.

Patrick Lopez, vicepresidente mundial de productos 5G, señala que “la reducción del consumo energético genera beneficios empresariales tangibles para las operadoras y es clave en el apoyo a las redes de consumo energético eficiente en el sector de las telecomunicaciones”.

NEC aspira a incrementar el ahorro energético de toda la red 5G mediante la aplicación de dicha tecnología al procesamiento en el plano de usuario en la RAN y al plano de control en el núcleo.

Los resultados forman parte de un proyecto de I+D post-5G encargado por la Organización para el Desarrollo de Nuevas Energías y Tecnologías Industriales (NEDO, por su siglas en inglés) japonesa.