Elon Musk ha declarado que el acuerdo multimillonario para adquirir Twitter quedará provisionalmente en suspenso, alegando la gran cantidad de perfiles de spam y falsos que existen en la plataforma.

Musk ha tuiteado que su propuesta de adquisición por 44.000 millones de dólares (más de 42.000 millones de euros) queda en suspenso “a la espera de detalles que confirmen la estimación de que las cuentas de spam / falsas, efectivamente, no suponen más del 5% de los usuarios”.

Poco después de dicho tuit, ha publicado otro en el que afirma que “el compromiso con la adquisición se mantiene”.

Hace escasos días, Twitter publicó un informe en el que indicaba que el 5% de los usuarios activos monetizables correspondientes al primer trimestre de 2022 consistía en spam y bots, días después de que Musk declarara que una de sus prioridades tras la eventual adquisición de la empresa consistiría en eliminar este tipo de perfiles.

Poco antes, Musk había anunciado que, en caso de hacerse con el control de Twitter, levantaría el veto a Donald Trump, expresidente de Estados Unidos.

Entretanto, Twitter ha despedido a Kayvon Beykpour, director general, y a Bruce Falck, director de Ingresos y Productos, tal vez para ir preparando la reorganización anunciada por Musk, y ha congelado la contratación de nuevos empleados, salvo los que se encarguen de tareas imprescindibles para el negocio de la empresa.

Hasta hace unos días, Musk parecía dispuesto a formalizar el trato, hasta el punto de haber presentado al regulador un documento explicando explicaba que dispondría de 7.000 millones de dólares adicionales (más de 6.700 millones de euros) para comprar Twitter. Asimismo, manifestaba su intención de asumir provisionalmente el cargo de consejero delegado.