Motorola ha desvelado su rumoreado smartphone Moto G, en cuyo acto de lanzamiento ha criticado los teléfonos de bajo coste que ofrecen sus competidores.

En una presentación agresiva, Dennis Woodside, consejero delegado de la firma propiedad de Google, ha asegurado que los consumidores con poco presupuesto tienen “dos opciones muy malas” a la hora de escoger smartphone: modelos nuevos con funcionalidades pasadas de moda, o bien antiguos modelos emblemáticos que han quedado superados.

Según Woodside, “el año que viene, 500 millones de personas comprarán un smartphone por unos 200 dólares. Y creemos de verdad que hasta ahora, su elección se limitaba a comprar un teléfono barato con tecnología del año pasado, o comprar un teléfono pasado de moda. Y no nos parece justo”.

El directivo ha mencionado el Galaxy Fame de Samsung, asegurando que “es un producto popular, con pantalla de 3,5 pulgadas, ni rastro de calidad HD, una cámara realmente mala, un procesador lento y no mucha capacidad de almacenamiento”.

A continuación, tomando el antiguo iPhone 4 de Apple como otra opción económica, ha dicho que “tiene una pantalla pequeña, un procesador mucho más lento que los actuales y ni siquiera admite las aplicaciones para iOS más recientes”.

“Creemos que la industria debería ofrecer más valor a cambio del dinero del consumidor”, ha afirmado.

Al presentar el nuevo terminal, la empresa ha indicado que el Moto G cuenta con pantalla de 4,5 pulgadas, resolución HD (720p) y densidad de 339 píxels por pulgada, asegurando que se trata de “la más detallada de su categoría”. Contiene un procesador Qualcomm de cuatro núcleos a 1,2 GHz y promete que la batería dura “todo el día”.

También dispone de carcasas intercambiables y fundas protectoras de varios colores, que ofrecen “19 posibilidades de personalización”. Y estará disponible en versión con SIM dual “en los países donde ello sea importante”.

En EEUU, el Moto G costará 179 dólares en la versión con 8 GB y 199 dólares en la de 16 GB. En el Reino Unido, el precio será de 135 libras, y en Europa de 169 euros. También se incluyen 50 GB de almacenamiento en Google Drive durante dos años.

El teléfono utiliza la versión base de Android. Saldrá al mercado con Android 4.3 y “se garantiza la actualización” a Android 4.4 (KitKat) en enero de 2014. Motorola ha presumido de su decisión de no imitar a sus rivales personalizando el sistema operativo con una capa propia de interfaz de usuario.

Punit Soni, el vicepresidente de productos de Motorola, afirma que “en el ecosistema actual, todos los fabricantes mantienen una relación muy confusa con Android. Construyen cosas sobre él, añadiéndole capas propias que perjudican la experiencia de uso. Y encima le ponen software duplicado, que básicamente compite con los servicios móviles de Google, y acabas teniendo pantallas de inicio con varias aplicaciones de correo, varias tiendas de aplicaciones, varios reproductores de vídeo y de música, etc.”

Insistiendo en su crítica a los rivales, Sonit continúa: “no le hemos puesto el interfaz TouchWiz [de Samsung], ni el interfaz Sense [de HTC], ni ninguna otra capa personalizada. No hemos duplicado los servicios móviles de Google. Hemos concentrado nuestra energía en incluir cosas que aporten valor de verdad al usuario”. Entre ellas se cuentan la optimización del dispositivo para que la batería dure el máximo, y “una atención obsesiva a los elementos básicos, ya sean el sonido, el almacenamiento de datos, la memoria, la sensibilidad táctil o la conectividad. Nos hemos centrado en los aspectos que hacen que dé gusto usar el teléfono”.

A diferencia de lo que hizo con el modelo anterior Moto X, con el Moto G Motorola realizará un despliegue geográfico más amplio, que abarcará “más de 30 países, con 60 operadoras, desde ahora hasta 2014”. El Moto G está disponible desde hoy en Brasil y en “algunas zonas de Europa”, a las que seguirán durante las próximas semanas el resto de América Latina y Europa, Canadá y algunas zonas de Asia. A principios de enero de 2014 se lanzará también en los EEUU, India, Oriente Medio y el resto de Asia.