La GSMA ha anunciado que Huawei, ZTE, Ericsson y Nokia han superado una auditoría de seguridad independiente sobre procesos de desarrollo y gestión del ciclo de vida de productos, y que dichas firmas someterán a evaluación su equipamiento para redes en una segunda ronda de pruebas.

Este análisis de los procesos y el equipamiento de los suministradores se está llevando a cabo en el marco de un plan de garantías de seguridad en equipamiento para redes establecido por la GSMA y el 3GPP. Dicho plan tiene como objetivo incrementar los niveles de seguridad en toda la industria de telefonía móvil y se centra en la parte de la cadena de aprovisionamiento que corresponde a los fabricantes.

Tras haber cumplido los requisitos exigidos en la primera etapa del proceso de aprobación, las cuatro firmas presentarán componentes de equipamiento específicos a laboratorios acreditados para su evaluación.

Los resultados se proporcionan a cada fabricante, siendo éste quien decide con total libertad si transmitirá la información a los clientes o la hará pública.

La GSMA señala que gracias a dicho plan los suministradores pueden demostrar que su equipamiento responde a los estándares unificados, lo que evita incoherencias entre los requisitos exigidos en distintos países y regiones.

Alex Sinclair, director de tecnología de la GSMA, explica que “al participar en el plan de garantías de seguridad en equipamientos para redes, los suministradores ayudan a las operadoras de red y a otras partes interesadas a tomar decisiones bien fundamentadas sobre el desarrollo de productos seguros”.

La organización añade que dicho proyecto supone “una iniciativa clave de la industria, que incrementa la transparencia e incentiva a los proveedores a desarrollar y apoyar el equipamiento de redes, de modo que protejan a las operadoras y sus clientes, y se adecuen a las exigencias en seguridad nacional”.

La noticia se ha dado a conocer en un momento en que la seguridad de la cadena de aprovisionamiento es una de las principales preocupaciones de la industria. Varios países impiden la participación de fabricantes chinos en sus redes 5G por razones de seguridad, mientras que en otras áreas las autoridades piden que se efectúen evaluaciones exhaustivas de la cadena de aprovisionamiento.