América Móvil ha sufrido pérdidas en el primer trimestre debido a la devaluación del peso mexicano frente al dólar estadounidense, si bien la firma destaca que las tendencias operativas son robustas y que se halla en una posición sólida para hacer frente a los problemas derivados de la Covid-19 (nuevo coronavirus).

El grupo de operadoras ha registrado pérdidas netas de 29.400 millones de pesos (unos 1.100 millones de euros), frente a beneficios de 19.600 millones de pesos (unos 736 millones de euros) en el trimestre equivalente de 2019. Los ingresos han aumentado en un 1,8% interanual hasta los 250.100 millones de pesos (unos 9.395 millones de euros).

Si bien la empresa informa de sus ingresos en pesos mexicanos, gran parte de su deuda internacional se recauda en dólares estadounidenses y euros, lo que ha conllevado un aumento de los costos de financiación de dicho período y ha contribuido a la fuerte caída en resultados.

América Móvil señala que desde inicios de 2020, y durante el período de aplicación de medidas para contener la propagación de la Covid-19, el peso mexicano ha perdido un 25% de su valor frente al dólar estadounidense, mientras que el real brasileño ha disminuido un 29% y el peso colombiano un 24%.

Con todo, señala un balance sólido y resultados positivos en todas sus “actividades principales”.

En cuanto a las perspectivas de futuro de la empresa bajo las medidas de salud pública impuestas por la pandemia, añade que “no está claro cuál va a ser su duración y magnitud, ni tampoco su impacto en los países donde tenemos presencia. En los tiempos que corren, la capacidad de recuperación financiera de la firma, y las amplias y vitales infraestructuras de que dispone después de un período de grandes inversiones son activos de gran importancia”.

Señala que la empresa ha transformado sus “procesos y planes comerciales” para adaptarse a la evolución de las necesidades ocasionada por la crisis. En dicho contexto, quiere mantener el flujo de caja y la rentabilidad general mediante ajustes en el capital circulante, así como en sus gastos de funcionamiento e inversiones de capital, según las necesidades que vayan surgiendo.