IDC pronostica que las ventas de smartphones disminuirán un 11,9% en el año actual hasta situarse en 1.200 millones de unidades, como consecuencia de la reducción en el gasto de los consumidores provocado por la pandemia de Covid-19 (nuevo coronavirus), y al mismo tiempo señala que los modelos 5G podrían resultar cruciales para reactivar la demanda.

Sangeetika Srivastava, analista sénior de investigación, afirma en un comunicado que los problemas de oferta causados inicialmente por la pandemia se han transformado en un “problema de alcance mundial por el lado de la demanda”.

“Las medidas de confinamiento aplicadas en países enteros y el aumento del desempleo han reducido la confianza de los consumidores y han reorientado el gasto hacia los bienes esenciales, lo que repercutirá directamente en la adquisición de smartphones a corto plazo.”

Apunta que los dispositivos 5G desempeñarán un “papel vital” en el retorno al crecimiento general del sector a partir del primer trimestre de 2021.

Con todo, Ryan Reith, vicepresidente del programa, señala que es probable que los fabricantes tengan que competir con mayor ahínco en sectores tales como ordenadores, monitores y consolas de juegos.

“Pensamos que, como resultado, veremos smartphones 5G con precios aún más agresivos que los que se esperaban antes de la pandemia”, si bien los fabricantes que “posicionen sus carteras para capitalizar el cambio” podrían beneficiarse de una mayor cuota de mercado.

Parece que el grueso de la disminución anual se producirá en el primer semestre, durante el cual IDC cuenta con que las ventas disminuyan un 18,2% con respecto al año anterior.

Se prevé que Europa experimente un descenso de dos dígitos en todo el año, debido al fuerte impacto de la pandemia en España e Italia, entre otros países. Con todo, la firma señala que los principales fabricantes podrán conservar sus cuotas de mercado si modifican las estrategias de venta, y alude a los canales digitales como una oportunidad.

En un primer momento las ventas en China se vieron muy afectadas, pero IDC señala que se está produciendo una desescalada de las medidas de confinamiento y se están subsanando las interrupciones en la cadena de aprovisionamiento, con lo que prevé que el descenso de 2020 sea de un solo dígito.