Según un nuevo informe publicado por OpenSignal, los usuarios de smartphones de 33 países distintos ya disfrutan de una mayor velocidad al usar una red celular en vez de Wi-Fi, pero la tecnología móvil de tres mercados desarrollados, entre los que se hallan los Estados Unidos, todavía está por debajo de sus posibilidades.

OpenSignal, una firma de mapeado de redes inalámbricas, ha publicado un estudio sobre el uso de redes Wi-Fi y móviles que afirma que las velocidades de descarga móvil son superiores a las del Wi-Fi en varios países, tanto en algunos mercados ricos como Australia y Francia, como en otros menos desarrollados como Qatar, Turquía, México y Sudáfrica.

Con todo, hay tres zonas muy desarrolladas –los Estados Unidos, Hong Kong y Singapur– donde “el uso del móvil no sigue la tendencia mundial” y “se halla en significativa desventaja” frente a las descargas realizadas mediante Wi-Fi.

Los usuarios de los tres países, al usar una red móvil, han obtenido descargas más lentas –38,6 Mbps, 34 Mbps y 25 Mbps por debajo, respectivamente– que las realizadas con Wi-Fi.

Australia marcha en cabeza

Entre todos los países analizados, los usuarios australianos de smartphone son los que más se benefician del uso de la red móvil en lugar de la Wi-Fi, y las velocidades medias de descarga son un 13 Mbps más rápidas como promedio. Los usuarios franceses disfrutan de una ventaja de 2,5 Mbps, y los de Qatar y Turquía, de 11,8 Mbps y 7,3 Mbps respectivamente.

OpenSignal explica que las tecnologías de móvil más recientes, como la 4G, han logrado que las redes móviles sean claramente superiores.

Según la firma, “en 50 países –el 63% de los que se han estudiado–, las redes 4G ofrecen una descarga a smartphone más rápida que con Wi-Fi, mientras que dichos países se reducen al 41% si la comparación se efectúa considerando toda la banda ancha móvil y no sólo la 4G”.

La 3G supera al Wi-Fi tan solo en siete países, y en cualquier caso se trata de una diferencia modesta, con un incremento de 3 Mbps en Líbano.

OpenSignal añade que es previsible que la tecnología móvil domine todavía más con la 5G, gracias a la velocidad de la innovación en telefonía móvil y a que la Wi-Fi precisa de la instalación de banda ancha en redes fijas, y “su actualización con FTTP (siglas inglesas de “fibra óptica hasta las instalaciones”) es lenta y cara”.

El informe añade que, a la luz de los resultados obtenidos, las operadoras y fabricantes de smartphones deberían “revisar sus estrategias de Wi-Fi”, sobre todo en lo que tiene que ver con la descarga móvil, la selección automática de redes y la cobertura en interiores, para no obligar a los smartphones de consumo a conectarse a un “Wi-Fi que funciona peor que la red móvil”.