Durante el pasado mes de marzo 399.107 líneas de telefonía móvil cambiaron de compañía en España. La cifra es la más baja a lo largo de un mes que el regulador CNMC ha registrado desde abril de 2017 y se sitúa casi un 36% por debajo de la del mismo periodo del año anterior.

Esta caída de las portabilidades en el mercado español es consecuencia de la crisis de la Covid-19 (nuevo coronavirus), en virtud de la cual el gobierno suspendió el día 18 de marzo, cuatro días después de declarar el estado de alarma, todas las portabilidades de líneas de telecomunicaciones, tanto móviles como fijas, a fin de evitar los desplazamientos de clientes a las tiendas y los de operarios a los domicilios.

El mes de marzo terminó en España con casi 54,5 millones de líneas móviles, un incremento interanual del 2,1% pero un descenso de 130.000 líneas respecto a febrero, que corresponde al balance entre las 132.000 líneas de prepago ganadas y las 260.000 de contrato perdidas. El 84,3% de las líneas móviles cuentan con servicio de banda ancha.

Entre las tres grandes operadoras suman el 77,4% del total de líneas móviles, con cuotas de mercado del 30,01% para Movistar (Telefónica), el 24,67% para Orange y el 22,68% para Vodafone. El resto se reparte entre el 13,89% del grupo MásMóvil y el 8,74% de las diversas OMV.

Precisamente MásMóvil, las OMV y Vodafone registraron saldos netos de portabilidad positivos, ganando 32.412, 19.361 y 6.929 líneas respectivamente. En cambio, tanto Movistar como Orange exportaron a otros operadores más números de los que captaron: 18.542 y 40.160 respectivamente.

Las líneas M2M para conectar objetos casi alcanzaron los siete millones, un 15,2% de incremento respecto al año anterior.