Mauricio Ramos (en la foto), consejero delegado de Millicom, ha destacado la política de su firma de buscar abonados 4G y desplegar redes de cable en su territorio de actuación en América Latina con el fin de conseguir un crecimiento sólido durante el tercer trimestre.

El grupo de operadoras informa de un incremento interanual del 52% en el número de conexiones 4G de sus divisiones de consumo. En estos momentos dichas conexiones se sitúan en los 8,6 millones. A finales de setiembre, la 4G suponía el 27% de dicho total.

Una de las prioridades estratégicas de Millicom en América Latina es ampliar el territorio donde ofrece servicios de cable. A primeros de octubre, la firma anunció su intención de incrementar sus activos de cable mediante la adquisición, por 1.000 millones de dólares (unos 878 millones de euros), de una firma panameña de cable llamada Cable Onda. Ramos cuenta con llevar a buen término la adquisición para finales de año.

El consejero delegado observa que las filiales de Millicom en Colombia, Bolivia y Guatemala han registrado un fuerte crecimiento, y añade que la próxima adquisición de Cable Onda “acelerará la expansión de la firma en el segmento del cable, ampliará su presencia en América Central y comportará una posición de sólido liderazgo en el mercado panameño”.

Los ingresos por servicios se han incrementado de un año para otro en todos sus mercados de América Latina, excepto en El Salvador y Costa Rica.

En El Salvador, “elementos puntuales”, problemas operacionales y la “mejora cualitativa” de su clientela han provocado una caída del 7,7% en los ingresos por servicios, con lo que estos se han quedado en 90 millones de dólares (unos 79 millones de euros). En Costa rica, los ingresos por servicios han declinado en un 1,4%, debido sobre todo a los cambios operacionales y a que la división de B2B ha perdido dos clientes de cierta importancia.

En África, donde la empresa opera en Tanzania y Chad, los ingresos se han mantenido iguales. Millicom añade que no ha dejado de padecer por la subida de impuestos en dicha región.

Las ganancias subyacientes del tercer trimestre han sido de 68 millones de dólares (unos 60 millones de euros), frente a los 21 millones de dólares (unos 18 millones de euros) en el mismo trimestre del 2017. Los ingresos se han mantenido más o menos iguales en los 1.500 millones de dólares (unos 1.318 millones de euros).