La Comisión Europea (CE) ha presentado un plan de inversión de 6.000 millones de euros para desarrollar un nuevo sistema de satélites que proporcione conectividad al continente europeo y a África, y respalde infraestructuras y aplicaciones clave en economía, seguridad y defensa.

El organismo europeo ha declarado que financiará la iniciativa mediante una aportación de 2.400 millones de euros de la Unión Europea (UE) desde 2022 hasta 2027, y que el resto provendrá de su propio presupuesto, de los Estados miembros y de inversiones privadas.

Una vez se haya construido, se añadirá a otros importantes sistemas satelitales de la UE, como el sistema mundial de navegación Galileo y el Copernicus, que se usa en la observación de la Tierra. El programa se lanzará en 2023.

La CE ha explicado que quiere usar la conectividad a través del espacio como “activo estratégico” para la resiliencia del continente. Así, aportará soberanía tecnológica, competitividad y acceso a una conectividad rápida a personas y a empresas.

La iniciativa contempla que las señales del sistema estén cifradas y que también proporcionen “conectividad en áreas geográficas de interés estratégico”, como por ejemplo África y el Ártico, y reduzcan la dependencia del mundo entero respecto a las infraestructuras producidas en China.

Thierry Breton, comisario de Mercado Interior, ha declarado que el espacio desempeña un papel cada vez más importante en la vida cotidiana y en “el crecimiento económico, nuestra seguridad y nuestro peso geopolítico”. Ha añadido que este proyecto paneuropeo permitirá que muchas empresas incipientes, y todo el continente, estén “a la vanguardia en innovación tecnológica”.

Espacio seguro
La iniciativa de la CE se añadirá a los sistemas de satélites comerciales y competirá con estos. Así, por ejemplo, el proyecto Kuiper de Amazon y Starlink de SpaceX.

La CE también ha propuesto que se regule el tráfico espacial y tratará de mejorar la gestión frente a lo que el organismo regulador describe como un incremento exponencial del número de satélites en órbita.

Así, aspira a proteger sus activos y garantizar un uso seguro y sostenible del espacio mediante el establecimiento de asociaciones internacionales.