Según Reuters, la Comisión Europea está considerando renovar la presión en favor de un solo tipo de cargador de teléfono móvil que funcione en todos los dispositivos, casi una década después de que la mayoría de los fabricantes accedieran a cambiar a una interfaz universal.

Actualmente, Apple usa sus propios puertos de carga, mientras que la mayoría de los demás fabricantes utilizan micro USB-B, o bien o USB-C en algunos dispositivos más nuevos.

La mayoría de los principales fabricantes firmaron un compromiso voluntario en 2009 para cambiar a un puerto de carga común en los teléfonos presentados a partir de 2011, lo que frenó cualquier intervención formal de la CE sobre el tema.

Sin embargo, en una carta filtrada a Reuters esta semana, la comisaria de competencia de la CE Margrethe Vestager (en la foto) califica de “insatisfactorios” los progresos hechos en esta cuestión. Vestager añade que la Comisión llevará a cabo una “evaluación del impacto” para decidir si se necesita una acción formal.

Aunque el memorando de entendimiento original firmado por los fabricantes expiró en 2012, los firmantes iniciales prorrogaron el acuerdo en 2013 y volvieron a hacerlo en 2014.

Según la CE, en el año 2009 había en el mercado 30 tipos diferentes de cargadores, y los cargadores viejos aportaban 51.000 toneladas de residuos al año en la UE.