Jim Whitehurst, presidente de IBM, ha indicado que el impacto negativo de la escasez actual de chips sobre la producción de smartphones podría prolongarse durante otros dos años. La firma está estudiando caminos alternativos para atender la demanda.

Whitehurst ha declarado a BBC News que la industria tardará en adquirir las capacidades necesarias para paliar la escasez actual y ha señalado que esta no afecta solo a los smartphones, sino a todo el sector de electrónica de consumo.

El directivo ha explicado que el aumento en la demanda de productos electrónicos de consumo, estimulado por la pandemia de Covid-19, ha influido en ello, y que los problemas de Huawei en Estados Unidos también han tenido un impacto notable en el suministro.

Ha declarado a BBC News que existe un “gran desfase” entre el desarrollo de tecnologías y la fabricación de chips. A fin de paliarlo, IBM trata de reutilizar ciertas tecnologías y prolongar su vida útil, además de reforzar la inversión en fábricas para incrementar su capacidad.

Otras firmas especializadas en chips, como Qualcomm y TSMC, también han observado dicha escasez, si bien la empresa estadounidense espera una mejora sustancial para finales de año, mientras que la taiwanesa prevé que la situación actual persista hasta 2022.