The Wall Street Journal (WSJ) informa de que un directivo de Huawei ha sido detenido y se enfrenta a la acusación de haber llevado a cabo en Polonia tareas de espionaje de alto nivel para un organismo chino.

En un artículo que cita como fuente a la corporación estatal de televisión Telewizja Polska, el WSJ un ciudadano chino que ejerce el cargo de director de ventas en la delegación de Huawei en el país.

Según parece, la agencia de contraespionaje del Estado polaco ha efectuado sendos registros en la delegación de Huawei y en el domicilio del directivo, cuyo nombre es Wang Weijing, y ha incautado documentos y datos electrónicos.

Al conocerse el incidente el viernes pasado, un representante de Huawei declaró a Mobile World Live que la firma china “estaba al corriente de la situación” y había “empezado a estudiarla”.  No obstante, la firma indicó también que “Huawei cumple con todas las leyes y regulaciones aplicables en los países en los que opera, y requerimos que todos los empleados cumplan con las leyes y regulaciones de los países en donde residen”.

 

Al día siguiente, la firma insistió en este último punto y comunicó el despido de su empleado, reconociendo el daño causado a su reputación: “Huawei ha decidido rescindir el empleo del Sr. Wang Weijing, quien fue arrestado bajo sospecha de violar la ley polaca. Sus presuntas acciones no tienen relación con la empresa. De acuerdo con los términos y condiciones del contrato laboral de Huawei, hemos tomado esta decisión porque el incidente en cuestión ha perjudicado la reputación de Huawei”.

 

Temores crecientes

Parece que el ya ex directivo de Huawei estudió en una destacada escuela de espionaje en China y había trabajado en el consulado chino en la ciudad polaca de Gdansk.

La Agencja Bezpieczeństwa Wewnętrznego (Agencia de Seguridad Interna) de Polonia también ha detenido a su propio ex director de Seguridad en Tecnologías de la Información, de nacionalidad polaca, en el marco de la misma investigación. Según el WSJ, dicho individuo conocía el funcionamiento interno de la red encriptada de comunicaciones del Gobierno. En la actualidad, trabaja en la filial de Orange en el país. BBC News informa de que las autoridades polacas también han efectuado registros en las oficinas de la operadora.

Ambos detenidos se enfrentan a acusaciones de espionaje, que comportan una sentencia de hasta diez años en prisión.

Las acusaciones se han hecho públicas en un momento en el que la firma china despierta suspicacias cada vez mayores. Gobiernos de todo el mundo han expresado su preocupación ante la posibilidad de que el equipamiento de Huawei suponga una amenaza para su seguridad nacional. Los Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda han prohibido la participación de Huawei en el despliegue de la 5G, las operadoras japonesas han declarado que evitarán colaborar con dicho fabricante, y organizaciones análogas en Europa han apuntado que podrían hacer lo mismo.

Huawei sostiene que su equipamiento es seguro y ha pedido a los gobiernos que presenten pruebas de las presuntas amenazas contra la seguridad.

Problemas para exportar tecnología estadounidense

Por otra parte, Huawei también podría enfrentarse a la prohibición de exportar a su mercado doméstico ciertas tecnologías desarrolladas en una filial estadounidense.

En efecto, WSJ informa de que la firma china no puede exportar ciertas tecnologías desarrolladas en la división de I+D llamada Futurewei Technologies, porque el Gobierno estadounidense ha indicado que no renovará la licencia de exportación de dicha filial.

El Departamento de Comercio estadounidense ha manifestado temores por la seguridad del país y ha declarado que su intención es denegar la renovación de la licencia solicitada por Futurewei Technologies. La empresa ha declarado su disconformidad.

Ciertos documentos a los que el WSJ ha tenido acceso muestran que una parte del software en cuestión consiste en tecnologías de transferencia de datos a alta velocidad, con un presupuesto operativo de más de 16 millones de dólares (unos 14 millones de euros).

Varias fuentes añaden que la filial seguirá operando en los Estados Unidos a pesar del revés que ha sufrido, porque la mayoría de las innovaciones exportadas por Futurewei Technologies no requieren licencia.

El centro de I+D abrió en el 2011 y emplea a unos 700 ingenieros y científicos.