La acosada Huawei ha accedido a cumplir las exigencias del Reino Unido en materia de seguridad, porque aspira a contribuir al desarrollo de la siguiente generación de redes 5G en dicho país, aunque la firma suscite una desconfianza cada vez mayor en el mundo entero.

Huawei se ha hallado recientemente bajo los focos en el Reino Unido, porque BT ha declarado que tiene la intención de retirar el equipamiento del fabricante chino de la red troncal de EE en un plazo de dos años debido a presuntas amenazas contra la seguridad. Dicha decisión hace dudar del futuro de Huawei en el país.

Con todo, el Financial Times afirma que Huawei aún podría tener un papel importante en la implantación de la 5G en el Reino Unido, puesto que ha accedido a cumplir las exigencias del país en materia de seguridad. Según el diario citado, dos personas informadas sobre las conversaciones entre las partes han revelado que directivos de Huawei se han reunido con altos cargos del NCSN (siglas inglesas del Centro Nacional de Ciberseguridad), un departamento del GCHQ (siglas inglesas del Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno, uno de los servicios de espionaje del Reino Unido) y el fabricante de equipamiento ha accedido a satisfacer varias exigencias técnicas relacionadas con los servicios que ofrece, y al mismo tiempo se ha prestado a remitir una carta formal al NCSC en la que esboza un acuerdo sobre cuestiones de seguridad.

A pesar de dicho compromiso, Huawei lo tiene difícil en Gran Bretaña y en el conjunto de Europa, a la vista de las recientes declaraciones del comisario de tecnología de la Unión Europea (UE).

Según Reuters, Andrus Ansip ha afirmado en conferencia de prensa que la UE debería desconfiar de Huawei y de otras firmas tecnológicas chinas, por los riesgos con que pueden amenazar a la Unión.

En Europa, los altos cargos de inteligencia han presionado a Alemania y el Reino Unido para que clarifiquen su posición sobre Huawei, después de que los Estados Unidos, Australia y Nueva Zelanda hayan prohibido que el fabricante chino suministre equipamiento a sus operadoras para el despliegue de la 5G.

Las preocupaciones del Reino Unido

Un comité de supervisión del Reino Unido que monitorizó y probó los equipos de la firma ya planteó sus dudas el pasado mes de julio.

Desde luego, la decisión de Huawei de plegarse a las presiones del Reino Unido, si se confirmara, es un indicio de la importancia que la firma china atribuye a dicho mercado en un momento en el que varios países europeos la están investigando. El gobierno del Reino Unido también podría apuntarse un tanto importante por el hecho de que Huawei está dispuesta a cambiar sus prácticas empresariales con tal de seguir operando en el país.

John Delaney, analista de IDC, ha declarado al FT que Huawei está presente en el Reino Unido y “es obvio que quiere quedarse”.

Aparte del acuerdo con EE sobre redes básicas, Huawei ha cerrado acuerdos sobre 5G con varias operadoras del Reino Unido para equipos de red de acceso a radio (RAN) tal como estaciones base.

Delaney explica que “es lógico que, por lo menos, presten su acuerdo formal, o pongan en marcha procedimientos tangibles que despejen las sospechas. No quieren que el contagio se extienda a otros países.”

Huawei es motivo de inquietud, ante todo, por sus relaciones con el gobierno chino.

Por otra parte, ha sido centro de atención durante estos últimos días porque Meng Wanzhou, directora de finanzas, hija de Ren Zhengfei, fundador de la empresa, ha sido arrestada en Canadá bajo sospecha de haber infringido las sanciones comerciales impuestas por los Estados Unidos contra Irán, y parece que Japón prepara nuevas regulaciones para impedir que la firma china solicite contratos gubernamentales.