EN DIRECTO DESDE MUNICH. Huawei ha presentado formalmente los dispositivos de su serie Mate 10. Utilizan el procesador más reciente de la empresa, optimizado para la inteligencia artificial (IA), y Richard Yu, el director de la división de consumo, ha asegurado que la gama “está diseñada para ofrecer el máximo rendimiento”.

Como es habitual en las presentaciones de Huawei, Yu no ha tardado nada en establecer comparaciones con los teléfonos de la competencia, y una vez más su objetivo principal han sido los modelos de Apple. “El iPhone X es realmente extraordinario, con su pantalla que ocupa todo el frontal. Han logrado un índice de pantalla sobre carcasa superior al 81%. Pero el nuestro es aún mejor. Y sin necesidad de muesca”, ha dicho, refiriéndose al espacio superior de la pantalla de Apple ocupado por las cámaras y sensores.

En concreto, mientras el iPhone X tiene un índice de pantalla a carcasa del 81,37%, el Mate 10 lo tiene del 81,79%. Y si se compara con el iPhone 8 Plus, la diferencia es aún más favorable al modelo de Huawei.

El directivo también ha cuestionado la adopción por parte de Apple de la tecnología de reconocimiento facial para desbloquear el terminal, recordando que se trata de una operación de tres fases (coger el teléfono, mirarlo y deslizar el dedo por la pantalla) mientras que un lector dactilar (como el que utilizan los nuevos Mate) permite hacerlo todo en una sola operación.

Incorporación de inteligencia

En la presentación se han destacado especialmente las funciones de IA del Mate 10, impulsadas por su procesador Kirin 970 y el software EMUI 8.0; de éste último (basado en Android 8.0) se asegura que “ha sido diseñado para desplegar todo el potencial de la IA en los móviles.

El Kirin 970 ya había sido presentado por Yu en su ponencia inaugural de IFA2017 en Berlín, a comienzos de septiembre. El chip contiene un módulo específico de procesamiento neuronal, cuyo objetivo es mejorar el rendimiento en aplicaciones de inteligencia artificial. De este modo, Huawei se sitúa por delante de sus mayores rivales, Apple y Samsung.

La firma china destaca las ventajas de usar el procesamiento dentro del propio dispositivo -y no en la nube- para algunas tareas de aprendizaje automático, como son el rendimiento y la seguridad.

El primero de los ejemplos utilizados por Yu, el reconocimiento de imágenes, ya era conocido de su presentación en IFA. A partir de un grupo de 100 imágenes, los cinco segundos que el Mate 10 tarda en reconocerlas son menos que los nueve segundos del iPhone 8 Plus y mucho menos que los 100 segundos del Samsung Galaxy Note 8.

También se han mostrado el reconocimiento en tiempo real de escenas y objetos (que es capaz de detectar 13 tipos de imágenes, entre ellas las fotografías de alimentos, flores y mascotas -llegando a distinguir entre gatos y perros- y aplicar automáticamente la modalidad más adecuada); y una función de traducción acelerada mediante IA: inicialmente se ofrece en alianza con Microsoft, admite más de 50 idiomas y asegura traducir un 300% más rápido.

La empresa también presume de su capacidad para aplicar el aprendizaje automático a la mejora del rendimiento del smartphone. “Utilizando la AI podemos mejorar un 60% la velocidad de respuesta del sistema y un 50% la regularidad del funcionamiento”, afirma Yu.

La familia Mate 10

El Mate 10 está disponible en dos versiones principales. El modelo estándar, con el sensor dactilar en la parte delantera, tiene pantalla 2K de 5,9 pulgadas (2.560 x 1.440 píxeles) de extremo a extremo, mientras que la del Mate 10 Pro es Full HD de 6 pulgadas y su sensor dactilar se encuentra en la parte trasera.

Al presentar el Mate 10 Pro, Yu ha afirmado que “una resolución superior a la Full HD es suficiente para la vista. En una pantalla así no se distingue entre 2K y Full HD, pero en cambio la batería dura más con esta resolución porque el consumo de energía de una pantalla 2K es mucho más alto”.

Sin embargo, al explicar el Mate 10, de tamaño parecido pero con resolución 2K, ha indicado que el uso de una pantalla RGBW reduce el consumo de energía debido a la gran cantidad de blanco que generalmente contienen las páginas web y las aplicaciones.

El Mate 10 cuenta con 4 GB de memoria RAM y 64 GB de almacenamiento, mientras que el Mate 10 Pro tiene 6 GB de RAM y 128 GB de almacenamiento. También existe una versión Porsche Design casi idéntica en prestaciones al Mate 10 Pro, salvo por el diseño y los 256 GB de capacidad.

Tanto el Mate 10 como el Mate 10 Pro utilizan una batería de 4.000 mAh compatible con carga rápida. La firma asegura que su tecnología SuperCharge es “la primera del mundo que ha merecido la certificación de Carga Rápida Segura de TÜV Rheinland”.

En cuanto a la función de carga inalámbrica que Samsung incorpora en su gama alta desde hace tres años, pero ahora está de actualidad gracias a la adopción por parte de Apple en los iPhone 8, Yu considera que su considerable lentitud constituye una limitación: “la carga inalámbrica parece una buena idea, pero cuando la usas en la práctica compruebas que es demasiado lenta”, ha declarado.

El Mate 10 cuenta con una “nueva cámara dual Leica” que se inscribe en la alianza entre Huawei y la prestigiosa marca de fotografía. En esta ocasión se utilizan lentes f/1.6 para mejorar las prestaciones con poca luz. La cámara en color es de 12 megapíxeles y la monocroma de 20 megapíxeles, la misma combinación que el modelo emblemático P10.

El modelo Mate 10 conserva el minijack estándar de auriculares de 3,5 mm. En cambio, el Mate 10 Pro ya no lo utiliza, pero Huawei asegura que a través del conector USB-C se obtiene una mayor calidad de audio.

En cuanto a la conectividad celular, el dispositivo es compatible con redes LTE de Categoría 18, que alcanzan velocidades de hasta 1,2 Gbps, gracias a la combinación de MIMO 4×4, agregación de portadoras 5CC y modulación 256QAM. La variante que admite dos tarjetas SIM permite que ambas sean LTE y compatibles con VoLTE.

También se han destacado las funciones del Mate 10 para empresas. El teléfono ofrece una modalidad de PC sin base de sobremesa, que permite mostrar el contenido en un monitor externo usando únicamente un cable USB-HDMI. También cuenta con provisionamiento sin contacto, que permite al departamento de TI configurar los dispositivos a distancia. Asimismo se incluye la sincronización del listín de contactos con LinkedIn.

Disponibilidad

Los colores del Mate 10 serán el dorado champán, el negro, el rosa dorado y el marrón café. Por su parte, el Mate 10 Pro se venderá en gris y azul medianoche, además de rosa dorado y marrón café.

En cuanto al precio, Ramiro Larragán, director de marketing de Huawei en España, ha reconocido a Mobile World Live que su firma está siendo muy agresiva (tratándose de un teléfono emblemático). Comparando con los 1.149 € que costará el iPhone X y los 999 € que cuesta el Galaxy Note 8, los 699 € del Mate 10 y los 799 € del Mate 10 Pro parecen casi una ganga, situándose incluso por debajo del modelo V30 de LG.

El Mate 10 estará disponible a partir de este mismo mes en “más de 15 países”, incluida España, los Emiratos Árabes, Arabia Saudí, Malasia, Singapur y Australia. En cambio, el Mate 10 Pro saldrá a la venta a mediados de noviembre en “más de dos docenas de países”, desde Alemania, Francia e Italia hasta los Emiratos, Arabia Saudí, Malasia, Singapur y Tailandia.

Por último, el Huawei Mate 10 Porsche Design también comenzará a venderse a mediados de noviembre, a un precio de 1.395 €, con un único acabado: negro diamante.