La situación de HTC en el cuarto trimestre de 2018 sigue siendo mala, porque el fabricante de dispositivos taiwanés no sale de los números rojos y los ingresos correspondientes a dicho período han experimentado un significativo descenso interanual.

La empresa informa de pérdidas netas de 4.400 millones de dólares taiwaneses (unos 126 millones de euros), lo que de hecho supone una mejora respecto a las pérdidas de 9.800 millones de dólares taiwaneses (unos 280 millones de euros) en el mismo período de 2017. Las pérdidas operativas trimestrales se sitúan en los 2.800 millones de dólares taiwaneses (unos 80 millones de euros) y también son menores que las de 9.600 millones de dólares taiwaneses (unos 274 millones de euros) en el trimestre equivalente de 2017.

Sin embargo, la facturación del cuarto trimestre cayó hasta los 4.100 millones de dólares taiwaneses (unos 117 millones de euros), frente a los 15.700 millones de dólares taiwaneses (unos 449 millones de euros) de 2017.

La caída en los ingresos del trimestre más reciente era previsible, porque la propia firma reveló en febrero que las ventas de diciembre de 2018 se habían quedado en 1.350 millones de dólares taiwaneses (unos 39 millones de euros), lo que supone un declive interanual del 66,4%.

La firma explica en una declaración que ha experimentado un fuerte avance en el mercado de empresas en el cuatro trimestre de 2018, porque su HTC Vive ha cobrado una gran importancia como dispositivo de realidad virtual, y confía en que dicho producto impulse una recuperación.

Parece que también cifra grandes esperanzas en el smartphone de cadena de bloques HTC Exodus 1 que lanzó en octubre de 2018. La empresa afirma que quiere cooperar con criptocomunidades y desarrolladores de todo el mundo para mejorar el dispositivo.

HTC ha finalizado el período con una liquidez en efectivo de 41.500 millones de dólares taiwaneses (unos 1.186 millones de euros).