HTC ha publicado sus cifras de venta de diciembre, en las que no se aprecia ninguna recuperación respecto al declive previo. Los ingresos de todo el 2018 implican un descenso de más del 50%.

Las ventas de diciembre de 2018 han sido de 1.350 millones de dólares taiwaneses (unos 38 millones de euros), lo que supone un descenso interanual del 66,4%, y del 8,2% respecto al mes anterior. Los ingresos de todo el año han sido de 23.700 millones de dólares taiwaneses (unos 671 millones de euros), con una caída del 61,8%, con lo que se sitúan en el punto más bajo en 15 años, desde la época en la que HTC, pionera en el sector del smartphone, inició su fuerte trayectoria ascendente.

Por ahora no parece que la mala situación de HTC vaya a mejorar, y ciertamente la caída experimentada en 2018 supera a la de períodos anteriores. Los informes de finales de 2018 parecen indicar que la firma seguirá produciendo sobre todo dispositivos de gama media y alta, si bien se especula con que podría prolongar el ciclo vital de su serie U12 antes de anunciar un nuevo dispositivo emblemático.

Pero la empresa también efectúa inversiones en otras áreas. Apuesta por la realidad virtual (RV) a través de su filial Vive, si bien por ahora no ha cosechado beneficios en dicho mercado naciente. Quizás anuncie nuevos productos de RV en el inminente CES 2019.

En cuanto a los smartphones, hace poco que ha lanzado el modelo Exodus 1, con el que se sube al carro de las cadenas de bloques.

Y también ha alardeado últimamente de sus capacidades de 5G: ha creado un router móvil que ya le ha permitido cerrar tratos con Sprint y con Telstra. No ha revelado sus planes para smartphones 5G, si bien el trabajo preliminar que ha realizado con el dispositivo, equipado con tecnología de Qualcomm, podría actuar en su favor.