Google incorporará a su aplicación Fit una nueva función con la que el usuario podrá medir su propio ritmo cardíaco y respiratorio mediante la cámara de un smartphone. La firma subraya que dicha medida no se contradice de ningún modo con su reciente adquisición de la empresa de ponibles Fitbit por 2.100 millones de dólares (unos 1.744 millones de euros).

Si bien los dispositivos de seguimiento de Fitbit se utilizan para registrar datos similares, un representante de Google ha declarado a Mobile World Live que considera positivo que se ofrezca “un medio adicional para efectuar mediciones de salud mediante los dispositivos que se usan en la vida cotidiana”.

Según los datos recopilados por Statista, en 2019 había unos 3.200 millones de usuarios de smartphones en todo el mundo, frente a unos 722 millones de dispositivos ponibles conectados (relojes, pulseras y dispositivos auditivos).

Google explica en su blog que la tecnología de visión por computador permite a las cámaras de los smartphones “detectar pequeñas señales físicas en el nivel de píxel”, como por ejemplo cambios de color en los dedos, a fin de medir la frecuencia cardíaca, y los movimientos del pecho para calcular la frecuencia respiratoria.

La firma advierte que dichas mediciones no deben usarse para diagnosticar enfermedades, pero que son “útiles para quienes usan la aplicación Google Fit a fin de efectuar un seguimiento y mejorar su bienestar cotidiano”. Los usuarios podrán eliminar los datos, o guardarlos para controlar las tendencias a largo plazo.

La nueva función estará disponible a partir de marzo para usuarios de Google Fit provistos de un teléfono Pixel, y llegará a otros dispositivos Android en el futuro.
Samsung había ofrecido un monitor de frecuencia cardíaca en algunos de sus smartphones Galaxy a partir del modelo S5, pero eliminó el sensor en el Galaxy S10e y los modelos posteriores.