Google ha interrumpido el desarrollo de tabletas de marca propia y señala que su actividad en materia de hardware para ordenadores “se centrará a partir de ahora exclusivamente en la creación de ordenadores portátiles”.

 

Rick Osterloh, vicepresidente sénior de Dispositivos y Servicios de Google, ha explicado en Twitter que los “equipos de Android y Chrome OS” de la firma “siguen comprometidos al 100% con la colaboración a largo plazo con los socios que fabrican tabletas para todos los segmentos del mercado (consumidores, empresas, educación)”.

 

ComputerWorld ha revelado que Google tenía previsto sacar dos tabletas, pero ha abandonado dicho proyecto para centrarse en los ordenadores portátiles. Según parece, los decepcionantes resultados del proceso de verificación de calidad han conducido a la cancelación de las tabletas.

 

La Pixel Slate, la tableta más reciente de Google, fue presentada a fines de 2018. La empresa ha declarado que seguirá respaldando dicho dispositivo, equipado con el sistema operativo Chrome OS. Previamente también había ofrecido tabletas con Android.

 

El mercado internacional de tabletas no es un terreno fácil para hacer negocios. El segmento en conjunto no crece y Apple se lleva una buena porción del pastel con su lucrativa gama de iPads. Además, fabricantes de hardware de primera línea como Samsung, Huawei y Lenovo –a los que también cabe añadir Amazon, el gigante del comercio minorista– compiten con ferocidad para impedir que otras firmas alcancen una escala suficiente.

 

Por otra parte, el crecimiento del segmento de los equipos dos-en-uno y los ordenadores portátiles con teclados desmontables, que también pueden ser utilizados como tabletas, está creando otro tipo de competencia en la gama alta.

 

Si tenemos en cuenta todo esto, quizá no debamos sorprendernos de que Google prefiera centrar sus desarrollos de hardware en otros sectores y prefiera respaldar a sus socios que utilizan Android y Chrome OS, y que ya tienen una posición más fuerte en el mercado de tabletas.

 

Estos cambios en la división de hardware no afectan a la línea de smartphones Google Pixel ni a los dispositivos Google Home / Nest.