Facebook ha descubierto que las contraseñas de millones de usuarios se guardaban en un formato accesible para sus propios empleados y ha adoptado medidas para resolver el problema. Así, el gigante de las redes sociales se ve afectado por un nuevo escándalo en materia de privacidad.

La firma explica en una declaración que “al realizar un control de seguridad rutinario, hemos descubierto que las contraseñas de algunos de los usuarios se guardaban en formato legible dentro de nuestros sistemas internos de almacenamiento de datos”.

Explica que “las contraseñas no han sido nunca visibles para personas ajenas a Facebook y tampoco tenemos indicios de que ninguno de nuestros empleados haya abusado de ellas, o haya accedido a ellas de manera impropia”, y declara que informará de lo ocurrido “a cientos de millones de usuarios de Facebook Lite, decenas de millones de otros usuarios de Facebook, y decenas de millares de usuarios de Instagram”.

La empresa ha animado a los usuarios a cambiar las contraseñas por pura precaución, y a plantearse la activación de una clave de seguridad o de autentificación de dos factores mediante los códigos de una aplicación de autentificación creada por un tercero.

La noticia ha salido a la luz pública poco después de que Mark Zuckerberg, consejero delegado de Facebook, revelase un ambicioso plan para reconfigurar la red social con el objetivo de proteger la privacidad de los usuarios, porque los organismos reguladores de Estados Unidos y Europa han cuestionado sus prácticas de recopilación de datos.

Facebook se halla bajo sospecha desde que en marzo de 2018 se conoció la filtración de datos a Cambridge Analytica, y varios cargos gubernamentales de Reino Unido y Alemania han condenado sus prácticas de privacidad y recopilación de datos.