Según el Financial Times, las autoridades estadounidenses están interesadas en facilitar que Ericsson y Nokia aventajen a Huawei, y estudian procedimientos para ofrecerles una asistencia financiera que les permita ofrecer condiciones de pago más competitivas por su equipamiento.

El periódico señala que tal medida ayudaría a los fabricantes europeos a contrarrestar la práctica de Huawei de ganar clientes mediante el recurso de ofrecerles plazos de pago más largos.

La financiación es una preocupación clave para las operadoras regionales estadounidenses, que en otros tiempos recurrían a las opciones más asequibles que les ofrecía Huawei y ahora sufren presiones encaminadas a disuadirlas de utilizar el equipamiento de la firma china.

Geoffrey Starks, comisionado federal de comunicaciones de Estados Unidos, ha afirmado recientemente que, a la vista de la situación actual, tanto Nokia como Ericsson se han ofrecido a crear productos y opciones de financiación dirigidos específicamente a las operadoras más pequeñas.

Las fuentes han revelado a FT que dicha idea es una de las varias que baraja la Administración Trump para proveer a las empresas de telecomunicaciones una alternativa al equipamiento de Huawei.

Otras propuestas consistirían en proveer de fondos gubernamentales a las operadoras para financiar la desinstalación y sustitución del equipamiento de Huawei, así como ofertas para que las empresas desarrollen equipos de red de código abierto y el respaldo a una nueva firma nacional.

En setiembre, Ren Zhengfei, fundador y consejero delegado de Huawei, detalló un plan para conceder licencias de tecnología 5G de su empresa a fin de crear una nueva firma con sede en Estados Unidos, pero por ahora no se sabe si su propuesta ha generado algún interés.